El Tribunal Supremo de Tailandia condenó hoy a 42 años de prisión al exministro de Comercio Boonsong Teriyapirom por falsear un acuerdo de venta de arroz con China.

Según los magistrados, Boonsong, en colaboración con otros acusados, asistió a compañías que no representaban al Ejecutivo de Pekín para asegurar un contrato de compra-venta del cereal entre los dos Estados, en el marco de las ayudas al arroz promovidas por el Ejecutivo de Yingluck Shinawatra (2011-2014).

Además de la pena de cárcel, el exministro tendrá que afrontar un pago de 16 millones de baht (480.000 dólares o 407.000 euros) a modo de compensación.

El tribunal también encontró culpables a otras 19 personas que colaboraron en el acuerdo, entre ellos el viceministro Poom Saraphol, condenado a 36 años de confinamiento.

Ocho acusados fueron absueltos, informa el diario "Bangkok Post"

Durante la jornada del viernes estaba previsto además la decisión de los jueces en un caso de presunta negligencia contra Yingluck por la gestión de la citada subvención agrícola.

La exmandataria, no obstante, evitó acudir a la vista al alegar un dolor de oído y mareos.

Ante la ausencia de un certificado médico que confirmara la indisposición de Yingluck, los jueces acordaron emitir una orden de arresto al considerar el riesgo de que la imputada abandone el país y aplazaron su decisión al 27 de septiembre.

El actual primer ministro, el general golpista Prayut Chan-ocha, señaló que desconoce si Yingluck sigue en Tailandia o ha dejado el país, y ordenó reforzar los puestos fronterizos para evitar una huida.

Horas después de su incomparecencia, se desconoce de manera oficial el posible paradero de la acusada, mientras el portal de noticias "Khaosod" publica que Yingluck voló la víspera a Singapur.

En la ciudad-estado, según la fuente, la exmandataria se reencontraría con su hermano mayor Thaksin, también ex primer ministro y quien vive desde 2008 en el autoexilio para evitar una condena a dos años de cárcel.

Yingluck está acusada de fallar en la supervisión de un plan de ayudas al arroz que, según la comisión anticorrupción, causó 600.000 millones de baht (unos 18.300 millones de dólares o 17.100 millones de euros) de pérdidas y fomentó la corrupción.

La exdirigente, que defiende su inocencia y denuncia ser "víctima" de un juego político, afronta una pena de 10 años de cárcel que podría ser suspendida y una multa de 35.700 millones de baht (unos 1.000 millones de dólares) en concepto de compensación.

De ser hallada culpable, la ex primera ministra también sería inhabilitada de por vida para ejercer un cargo público, conforme a la Constitución vigente.

Yingluck llegó al Gobierno en 2011 tras ganar con mayoría absoluta al frente de uno de los partidos creados por su hermano Thaksin y fue depuesta tras una polémica sentencia del Tribunal Constitucional pocos días antes de que el Ejército tomara el poder en un golpe de Estado en mayo de 2014.

Las plataformas políticas ligadas a Thaksin, depuesto en la anterior asonada de 2006, han ganado todos los comicios en Tailandia desde 2001 gracias al apoyo de la clase rural del noreste y a pesar de la oposición de gran parte de la clase media y las élites cercanas a la monarquía y el Ejército.

Tailandia atraviesa una profunda crisis política que la mantiene desde hace más de una década en un bucle donde se suceden protestas antigubernamentales, periodos dictatoriales encabezados por el Ejército y lapsos democráticos.