El presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, ha asegurado hoy haber centrado su réplica en el pleno del Congreso en responder a la portavoz del PSOE, Margarita Robles, para "favorecerla" a ella como representante del "principal partido de la oposición" y reconocer esa posición de los socialistas.

Eso sí, Rajoy ha insistido en recriminar a la portavoz socialista su posición junto a Podemos en este pleno -pidieron ambos partidos la comparecencia del presidente- y le ha advertido de que "esto no es un tribunal" y por tanto él tiene derecho a contestar las acusaciones que le hagan desde la oposición.

Fuentes del PP han justificado la estrategia de Rajoy de responder solo a Robles y apenas referirse al resto de los portavoces en la necesidad de "marcar" a la portavoz socialista en su primer gran debate desde que asumió ese cargo.

Según las mismas fuentes Rajoy ha buscado también mostrar en qué posición está el nuevo PSOE, que pese a ser el principal partido de la oposición sigue apoyando o sumándose a las iniciativas de Podemos en lugar de tener las suyas propias.

En esta última intervención, Rajoy se ha dirigido al líder de Podemos, Pablo Iglesias, al volver a cuestionar la financiación del partido morado y sumarse a la petición que ha hecho el portavoz del PP, Rafael Hernando de reclamar "transparencia para todos".

Y mientras Iglesias le recordaba con los dedos de las manos las seis preguntas que le ha planteado sobre corrupción, el jefe del Ejecutivo ha usado también los suyos para plantearle "solo dos" cuestiones: "Venezuela e Irán".

También le ha preguntado a Iglesias, que "está a favor de la transparencia", qué hacía en la cena que compartió hace unos días en Cataluña con el líder de ERC, Oriol Junqueras, y el presidente de Mediapro, Jaume Roures.

"Creo que es importante que lo conozca la Cámara porque puede tener consecuencias políticas, sobre todo en Cataluña", ha dicho Rajoy sobre aquel encuentro.