El exministro de Economía, Carlos Solchaga, ha previsto un crecimiento económico "aceptable" en España para los próximos años pese a incertidumbres como Donald Trump, la situación de Cataluña o el "populismo de izquierdas" de Podemos.

Así lo manifestó en declaraciones a los medios de comunicación con motivo de la ponencia ''Perspectivas económicas en tiempos inciertos'' que ha impartido en el marco del ''Forum Premium del Atlántico'' de Santa Cruz de Tenerife.

Respecto a su ponencia, Solchaga explicó que aborda cómo las incertidumbres políticas [como el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, o las elecciones alemanas y su repercusión en la UE, ejemplificó] influirán sobre España.

Luego, añadió, están las incertidumbres internas, como la cuestión catalana o la irrupción de un parlamento de España mucho más fraccionado "y donde hay una presencia importante de populismo de izquierdas".

Así, comentará su percepción sobre si este populismo está en trance de seguir creciendo o si, como es su opinión, "Podemos está ya empezando a decrecer y, no siendo como no es un partido, sino una confluencia de movimientos más o menos radicalizados, puede empezar a disolverse y a ser menos importante".

"A pesar de estas incertidumbres --continuó--, tengo el pálpito de que el país va a seguir adelante con la recuperación", para concluir insistiendo en que España debería tener unos años de crecimiento "aceptable".

MEJOR TRABAJO MALO QUE ESTAR EN EL PARO

Ya en el coloquio, ha comentado que "el país está saliendo adelante" gracias a la mejora de la competitividad --no ha ocultado que en parte se debe a la bajada de salarios-- y la balanza de las exportaciones, resaltando que el turismo va a seguir tirando de la economía, especialmente en una economía de servicios, que será "la economía del futuro" frente a la industrial, que cada vez produce más productos y a menor precio.

En este escenario, ha dicho que "el valor del conocimiento y la preparación de la gente será fundamental".

Ha dicho que España está generando 600.000 empleos anuales, muchos de ellos "malos y precarios", pero "siempre es mejor" que estar en situación de desempleo, ha apostillado.

Sobre el origen de la crisis, "que ha sido muy dura" y casi inimaginable hace 15 años, ha señalado que al Gobierno "se le escapó de las manos" el control de la burbuja inmobiliaria, generada principalmente porque "se invertirá sin dinero y el que lo prestaba tampoco lo tenía".

Esto a su juicio, generó una "gran insatisfacción y falta de expectativas en la gente joven", cuya consecuencia política es la irrupción de los populismos, tanto a la izquierda como a la derecha.