Los pacientes del Hospital Universitario de Canarias (HUC), uno de los cuatro centros de tercer nivel que hay en Canarias, han sido "abandonados y olvidados" por la administración, porque cuentan con menos personal para atenderlos incluso que en cualquier hospital comarcal de España, según han denunciado los trabajadores de enfermería en una comisión parlamentaria.

Begoña Romero Menor, de la Asociación social HUC/SCS, expuso que los trabajadores técnicos en cuidados auxiliares de enfermería han decidido alzar la voz cansados de cómo degenera la atención al paciente por la falta de personal o la indefinición de sus funciones.

El Hospital Universitario se integró plenamente en el Servicio Canario de Salud en 2009, pero no se ha dotado de personal al nivel de los otros tres hospitales de referencia.

La falta de personal es tal que un auxiliar de enfermería, que tendría que dedicarse solo a atender pacientes, cumple además funciones como celador, limpieza, distribución, mantenimiento, pinche de cocina y administración.

"Son muchos años esperando a que el SCS atienda a los usuarios de este hospital al menos de la misma forma que en el resto", denunció, pero como los sindicatos "no han levantado la voz" por los trabajadores han sido estos los que han decidido levantarla por los pacientes.

El consejero de Sanidad, José Manuel Baltar, que estuvo presente en la comparecencia, se mostró sensible con estas reivindicaciones y con la mala situación del HUC, que achacó a que la integración se hizo en plena crisis con unos planes que no se realizaron y un futuro "que no hubo".

"Esto exige un trabajo en profundidad serio, le tiendo la mano y cuente con la voluntad de la Consejería de abordar el problema", dijo Baltar, y Elena Luis, de CC, afirmó que le consta que la Dirección General de Recursos Humanos ya trabaja en ello.

Iñaki Lavandera, del PSOE, coincidió en que el HUC no es un ejemplo de buena gestión y se mostró a favor de corregir todas las deficiencias denunciadas, mientras que Zacarías Gómez, del PP, admitió que la clase política no se ha ocupado de estos problemas y ahora está obligada a solucionarlo.

El diputado de Podemos Juan Márquez aseguró que el abandono del HUC y de la sanidad tinerfeña no es casual, sino deliberado, para favorecer a las clínicas privadas y recordó que su grupo presentó una enmienda de 10 millones de euros para dotar de personal a este hospital que fue rechazada por CC y PSOE.

"Presumen de que sube el PIB y de que negocian aumentos presupuestarios pero lo destinan a carreteras, farolas y rotondas, no a sanidad", denunció.

Roman Rodríguez, de Nueva Canarias, coincidió en que "hay que hacer un proceso concienzudo de normalización" del HUC, lo cual "requiere más recursos", pero su partido cooperará para encauzar este problema.