El director de teatro tinerfeño José Padilla (Santa Cruz de Tenerife, 1976), como todo dramaturgo que se precie, siente una atracción especial por la obra de Shakespeare. Así lo demuestra, una vez más, con la quinta que versiona del genio inglés, "Medida por medida".

Este montaje, que recibió el premio Gayarre al mejor proyecto escénico 2017, será representado hoy, a partir de las 20:30 horas, en el teatro Guimerá de Santa Cruz, por la compañía navarra In Extremis Teatro, que eligió al director tinerfeño para abordar esta propuesta.

Esta obra clásica, que se estrenó en el año 1604, se ofrece con una visión contemporánea con la intención de plantear una serie de cuestiones de rabiosa actualidad, como son la corrupción, la justicia, el chantaje sexual o el poder, entre otras.

La acción se desarrolla en Viena en una época indeterminada. El duque regente de la ciudad la abandona y cede el poder a otra persona para que aplique las leyes en desuso. Un hombre deja embarazada a una mujer y en dos días le cortarán la cabeza, a no ser que su hermana entregue su virginidad al que ejerce la justicia.

El elenco de actores que interviene en esta pieza, una de las que más dificultades interpretativas encierra de la producción de Shakespeare por la complejidad de su texto, está formado por Txori García, Leire Ruiz, Iratxe García, Juan Sansegundo y Oier Zuñiga.

"Es una versión que está muy enraizada en nuestro contexto sociopolítico porque habla de un periodo de corrupción política y cómo la corrupción política se traduce inmediatamente en corrupción moral. Mi versión la he ceñido a esta propuesta de Shakespeare, porque creo que es un valor añadido y algo con lo que el público podrá identificarse. No hay más que abrir los periódicos todos los días para ver lo que nos está contando. Algo que escribió hace cuatrocientos años".

Padilla puso su mirada en esta pieza de Shakespeare porque, según aclaró, le llamó la atención todas las aristas que encierra, "como todas las obras que escribió. No se limita a presentarnos personajes de cartón piedra, el habla de las contradicciones del ser humano y cómo estas se van desarrollando en función de lo que se van encontrando. Eso me permitía como dramaturgo y director tocar muchas teclas para facilitar el viaje desde el siglo XVII hasta hoy. Es lo que más me llamó la atención".

Este nuevo reto escénico en el que se ha embarcado el dramaturgo canario, único autor español que ha estrenado una obra en el Globe Theatre de Londres, en concreto una adaptación de "Enrique VIII" de Shakespeare, refleja su admiración por el autor inglés porque su producción abarca "todo lo que es el ser humano".

Este hombre de escena, Premio Ojo Crítico de Radio Nacional de España en 2013, mantiene su línea de trabajar a pie de escenario, muy cerca del actor. "Es mi línea de investigación. Me sigo plegando mucho al proceso del actor. Creo que es mucho más rico así, porque eso luego revierte en la calidad de la función. El actor es el principio y el final del teatro. Si me pliego a él el resultado redundará en algo bueno con seguridad".

Padilla, que dirigirá el próximo mes la obra "Hécate y la frontera" en Málaga con una compañía de dicha ciudad, está contento por volver a su tierra con una obra suya, aunque puntualizó que "sigo estrenando por fortuna con asiduidad en los escenarios madrileños, pero esto no ocurre en mi tierra. Aspiro y opto a que está situación cambie, porque me gustaría estar más presente".