El entorno familiar de Pedro Pérez Martín, el ciudadano palmero desaparecido en el municipio de Tijarafe el pasado mes de marzo, descarta que desapareciera por no consumir o comprar sus fármacos para tratar de enfermedad psiquiátrica. Este hombre, de 46 años, no había cesado en la compra de sus medicamentos en los últimos meses. Y, de hecho, parte de esos productos fueron hallados en su vehículo, que apareció abandonado y abierto.

Pedro Pérez sufrió una crisis en su patología en diciembre del año 2015, que le llevó a encerrarse en su vivienda y a permanecer sin comer varias semanas. Fue encontrado en enero del año siguiente en un estado muy grave. La familia de este palmero cuenta con el apoyo del criminólogo tinerfeño Félix Ríos. Una de las certezas con que cuentan su entorno y la Guardia Civil es que, el mismo día de su desaparición, el 20 de marzo, retiró una denuncia que interpuso contra una persona en el cuartel del Instituto Armado. La libreta en la que reflejaba su actividad laboral permite saber a los investigadores que Pérez estuvo trabajando hasta el mismo día en que se le vio por última vez. Y, posteriormente, pasó por la farmacia para comprar su medicación. Según Félix Ríos, "aún es pronto para descartar posibilidades, pero si Pedro decidió desaparecer voluntariamente, nada indica que fuera por no ingerir sus fármacos". El abogado de la familia, Javier Ramos, ha pedido a la Guardia Civil el atestado sobre las llamadas recibidas por Pérez antes de su desaparición.