El portavoz del PDeCAT en el Congreso, Carles Campuzano, ha asegurado que el presidente de la Generalitat, Carles Puigdemont, hizo ayer al jefe del Ejecutivo, Mariano Rajoy, la oferta "generosa" de hablar y le ha pedido que acepte esa "oportunidad" porque puede "ser la última" para una solución "buena para todos".

Campuzano ha advertido, eso sí, de que el diálogo debe partir del reconocimiento de Cataluña como "sujeto político" y de aceptar que los catalanes tienen derecho a decidir sobre su futuro, porque esa es precisamente la discusión que piden tanto la comunidad internacional como la sociedad, la de "la cuestión nacional catalana".

En el debate sobre Cataluña en el Congreso, y tras insistir en defender la validez del referéndum del 1 de octubre, el portavoz del PDeCAT ha advertido además a Rajoy de que si aplica el artículo 155 de la Constitución cometerá "un error mayúsculo".

"Abandonen cualquier pretensión de resolver por la fuerza" esta crisis, porque "no es democrático, civilizado y europeo", mientras sí lo es el diálogo, ha dicho.

Campuzano, además, ha comenzado su intervención denunciando de nuevo la "violencia policial inadmisible" que se produjo el 1 de octubre y ha lamentado que ni Rajoy, ni el ministro del Interior, Juan Ignacio Zoido, "ni el Monarca" hayan pedido disculpas por aquellos sucesos.

Incluso ha considerado que Zoido ya tendría que haber dimitido por la actuación "inadmisible" de la Policía Nacional y la Guardia Civil, que "va a marcar a varias generaciones de catalanes".

El portavoz del PDeCAT ha insistido en subrayar que lo que hizo Puigdemont ayer -anunciando primero que cumpliría el "mandato" de la independencia para acto seguido suspender sus efectos- fue "un acto de tremenda generosidad.

Y lo fue, ha continuado, porque el jefe del Govern "mantuvo abierta la puerta del diálogo" para "destensar" esta situación, y se dirigió a todos, especialmente a Rajoy, para expresar la voluntad de "reentenderse".

"Aproveche la oportunidad que ayer le ofreció el señor Puigdemont, quizá sea la última que tengamos todos para alcanzar una solución buena para todos", ha insistido.

Además de pedir a Rajoy que no aplique el 155, Carles Campuzano ha exigido poder dialogar en un "clima político distinto" que haga posible la "resolución de conflictos".

Y por eso le ha reclamado la retirada de los efectivos policiales de Cataluña, restaurar para la Generalitat el control de las finanzas y derogar el decreto que facilita la salida de empresas de la comunidad.

Igualmente, ha instado a Rajoy a que haga que su partido, el PP, destierre "cualquier atisbo de discurso incendiario" como el que hizo, ha dicho, el vicesecretario de Comunicación del PP, Pablo Casado, y condene las "acciones de extrema derecha" que están "resurgiendo" en España.