Jaime Bergel, director del fondo de inversión HIG y exejecutivo de Goldman Sachs y Merrill Lynch, describió ayer Canarias como "un lugar extraordinario" para que invierta el capital riesgo, aunque por ahora la introducción de estos fondos en las Islas es más bien escasa.

Durante una charla organizada por la Asociación para el Progreso de la Dirección (APD) en el Club Oliver de Santa Cruz de Tenerife, Bergel constató que las condiciones que ofrece el Archipiélago para la entrada de capital riesgo -financiación aportada por fondos especializados en empresas con un elevado potencial de crecimiento- son las idóneas, puesto que su seguridad jurídica es "la misma" que la del resto del territorio español y además cuenta con incentivos fiscales que, a su juicio, son "lo más importante para atraer inversión".

"Es difícil explicar por qué hay tan poca inversión", reconoció el directivo, que especuló con la posibilidad de que la distancia entre Canarias y la Península -donde se encuentran los centros de dirección de estos fondos- pueda influir en esta situación.

Según Jaime Bergel, existen razones para que el capital riesgo -al que él prefiere referirse como capital privado- invierta en las Islas. Una es la presencia de "un tejido empresarial muy interesante, muy basado en la economía familiar, que es la que más cuida sus dineros", apostilló. Otro factor es que hay "pocos competidores". "Tiene mucho sentido invertir en Canarias, y no me explico por qué no se hace más", insistió el director de HIG.

La intervención de Bergel comenzó con la enumeración de los motivos por los que, desde su punto de vista, el capital privado es "muy bueno para la economía en general". "Es la forma más eficiente de asignación de recursos, porque hace un análisis muy profundo del sector y de la compañía en la que se va a invertir para intentar llevarla a una estructura de capital más eficiente", afirmó. En segundo lugar, aludió al papel de estos fondos al "sustituir a los bancos en situaciones más complejas". Las entidades bancarias, a su juicio, "no creen tanto en los proyectos empresariales como el capital riesgo". La búsqueda de la máxima rentabilidad a través de "la gestión más eficiente" es otro de estos factores,

Bergel defendió a los fondos de capital riesgo ante la "mala fama" que tienen. En este sentido, cifró en más de 5.500 las empresas que salen adelante cada año en Europa por la entrada de este capital, cuya aportación al producto interior bruto "no deja de crecer", agregó. También reivindicó su contribución al empleo, puesto que la incorporación de los fondos a algunas empresas evitan la destrucción de puestos de trabajo. "He visto situaciones en las que se han salvado cientos de empleos porque ha entrado un fondo", aseguró.

Las funciones del capital riesgo tienen que ver, prosiguió el directivo, con la generación de valor en tres ámbitos: la gestión, el acceso a financiación adicional y la aportación al crecimiento de la empresa.

Preguntado por el cambio que pueden producir las nuevas tecnologías en el sector del comercio al por menor -con una gran presencia en el Archipiélago-, Bergel advirtió de que la adaptación de las empresas tiene que ser "muy rápida". "Si no es así, muchas compañías van a morir", indicó. Esta "tremenda" revolución tecnológica afectará a "todos los sectores". El mercado inmobiliario, por ejemplo, experimentará "un cambio radical".