"La red de telescopios CTA es ciencia, pero no solo eso", afirma Ramón García López, investigador principal de CTA (Cherenkov Telescope Array) en el Instituto de Astrofísica de Canarias (IAC). "Su instalación en el Observatorio del Roque de los Muchachos va a suponer un gran impacto económico en La Palma. Poner estos telescopios en marcha y mantenerlos durante al menos 30 años, aparte del personal científico y técnico que se va a necesitar, repercutirá positivamente a distintos niveles".

La red de telescopios Cherenkov la constituye un conjunto de más de 100 telescopios distribuidos entre La Palma y Chile que estudiarán el Universo a la más altas energías: los rayos gamma. Parte del Consorcio científico que respalda esta iniciativa se reúne estos días en la Isla.

"Desde el punto de vista científico, es un macroproyecto con el que esperamos hacer ciencia puntera y llevar a cabo descubrimientos hasta ahora imposibles con la instrumentación actual", añade Ramón García López. "No obstante, somos conscientes de que una instalación de estas dimensiones afectará a la vida de los palmeros, y nuestra intención es que aportemos mucho más que conocimiento, fomentemos el empleo y atraigamos industria que dinamice la economía", subraya.

Este investigador avisa de que "hará falta empresas, servicios y personal que se radique aquí para satisfacer la demanda que generará CTA". Por ejemplo, advierte, no hay ninguna empresa en La Palma que pueda mantener los centenares de segmentos que forman los espejos de los telescopios Cherenkov, y hay que recurrir a instalaciones en el extranjero. "Lo ideal sería atraer empresas españolas que se radiquen en la Isla y que vean en ello un negocio", sentencia.