Las áreas de Juventud y Cultura del Ayuntamiento de Los Realejos y las Escuelas Artísticas del municipio han puesta en marcha una curiosa iniciativa: permitir la realización de grafitis con interés artístico con el objetivo de evitar las continuas pintadas que afeaban las paredes del edificio de aparcamientos de la trasera del Consistorio norteño. Estos grafitis contra el vandalismo pretenden decorar las paredes con obras de grafiteros de municipios de la Isla para acabar con las pintadas sin orden, concierto ni valor estético que se debían borrar periódicamente.

En las últimas semanas se ha procedido a la ejecución de las obras de puesta a punto del edificio que alberga los aparcamientos municipales junto al Ayuntamiento de Los Realejos. Las paredes se han repintado, pero desde el gobierno local (PP) se temía que todo ese trabajo se echara pronto a perder con una nueva oleada de pintadas vandálicas. Una problemática que ha sido una constante en la historia de este inmueble.

El gobierno municipal relata a EL DÍA que "venía repitiéndose, de una manera reiterada, el problema de la aparición de pintadas en todas las paredes de este edificio público".

El Ayuntamiento de Los Realejos y su empresa municipal de servicios (Realserv) se veían obligados a proceder, una y otra vez, a la limpieza o repintado de las paredes del edificio. Sin embargo, a los pocos días, las pintadas se volvían a repetir y el dinero público se tenía que seguir gastando en reparar los daños causados en el patrimonio municipal con pintura en spray.

La solución que el consistorio ha planteado al problema ha sido contactar con un grupo de grafiteros jóvenes de la comarca y de la Isla para "ofrecerles las paredes del edificio para que, con una temática totalmente libre, expresaran su arte".

El grupo de gobierno realejero destaca que "la experiencia nos ha demostrado que en los espacios en los que este tipo de artistas plasman una obra, se produce un mayor respeto ciudadano y esas obras no se suelen agredir con otras pintadas".

El concejal de Promoción Cultural de Los Realejos, Adolfo González, estuvo este viernes presente en una visita de un grupo de escolares del colegio Pureza de María, de Los Realejos, que habían tenido constancia a través de las redes sociales de la confección de estos grafitis en el edificio realejero, y decidieron acudir a la zona para hablar con los artistas.

La presencia de los grafiteros no ha pasado desapercibida para los vecinos del entorno, que, en un primer momento, alertaron a las autoridades locales de la actividad de estos artistas urbanos, por si se trataba de algo no autorizado. "Cuando se les explicó en qué consistía el proyecto, estos vecinos inicialmente alarmados lo recibieron con interés y buena predisposición", explican desde el consistorio.