La presidenta de la Junta de Andalucía, Susana Díaz, ha criticado hoy la "vocación centralista" del presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, al que ha acusado de utilizar el "lío" territorial y la crisis de Cataluña para intentar recortar competencias al autogobierno.

La dirigente andaluza ha participado este 4 de diciembre, cuarenta años después de que millón y medio de andaluces se echaran a la calle en 1977 para pedir autonomía, en un foro de la ''Cadena Ser'', junto con Rafael Escuredo, primer presidente electo de Andalucía.

En este foro, Díaz ha abogado por una reforma de la Constitución "sin agravios ni privilegios" y ha hecho un llamamiento a los partidos andaluces para defender a Andalucía ante el "peligro y la tentación" de que el debate territorial acabe provocando un Estado de las autonomías a "dos velocidades".

"En este debate, Andalucía será un factor de equilibrio para garantizar la igualdad territorial sin privilegios. Nos va a tocar levantar la voz en defensa de la igualdad", ha sostenido.

Entre los "peligros" en este debate, la socialista se ha referido a los nacionalismos, que "siempre son insolidarios", y a los que "quiere debilitar" al Estado y "reventar" la Constitución.

Convencida de que el PSOE andaluz "siempre" ha sido una garantía para la igualdad de España, la presidenta autonómica ha considerado que el Gobierno de Rajoy está inmerso en un "proceso de recentralización" que ha rechazado.

Como ejemplo, ha citado las condiciones que el ministro de Hacienda, Cristóbal Montoro, "impone" a las comunidades por acogerse al FLA (Fondo de Liquidación Autonómica) o decisiones de la Junta como la recuperación de la 35 horas semanales recurrida al Tribunal Constitucional (TC).

Para Díaz, todo ello responde a la "vocación centralista" de Mariano Rajoy, al que ha recriminado que esté "aprovechando el "lío" territorial para intentar recortar competencias" al autogobierno.

También ha arremetido contra Podemos, a cuyos dirigentes se ha referido como la izquierda "moralista" o "truhanes" que quieren "reescribir" la historia.

"Hay truhanes que pululan por la política para sacar tajada", ha denunciado la dirigente socialista, que ha insistido en llamar al consenso de las formaciones políticas andaluzas en este momento histórico: "A quienes se pongan delante de las mareas se los va a llevar la gente", ha vaticinado.

El expresidente Rafael Escuredo, al igual que Díaz, ha esgrimido que, pese a los "intentos de manipulación", la autonomía andaluza es "hija" de la Transición, que "no se entiende" sin la Constitución, y ha ensalzado el 4D del que ha dicho que "no tendría sentido" sin el 28F.

"Andalucía tiene que estar por encima de los partidos. Va a tener que ponerse de pie porque vienen tiempos difíciles, de mucho ruido, pero nadie gana en la calle lo que no gana en la urnas", ha indicado Escuredo.

Sobre la propuesta del líder del PSC, Miquel Miceta de un nuevo modelo de financiación autonómica con hacienda propia para Cataluña, Escuredo ha admitido: "Me da mucho miedo cuando oigo hablar de cooperación fiscal, me da mucho miedo el fuego amigo".

La presidenta ha eludido entrar en detalle sobre este planteamiento ante el comienzo de la campaña para las elecciones catalanas, aunque ha dejado clara su oposición a la iniciativa del lehendakari, Íñigo Urkullu, de usar el cupo vasco como referencia para el sistema de financiación autonómica.

Díaz ha advertido de que supondría "romper" la caja única de la Seguridad Social y "poner en peligro a todo" un país.