El grupo de gobierno de El Rosario sacó adelante su presupuesto para el próximo ejercicio 2018, un montante de 15,9 millones de euros que sacaron a la luz no ya solo el lógico y tradicional rechazo de la oposición, sino las grandes diferencias existentes en el seno del Partido Socialista (PSOE) en donde Álvaro Meneses y José Estévez (se estrenó como portavoz de grupo) y las ediles Soledad Negrín y María de los Ángeles Rodríguez (faltó Iván Armas), se tiraron los trastos, absteniéndose los primeros y apoyando los números los segundos, los que forman parte del gobierno.

Lo cierto es que el mayor presupuesto de la historia del municipio de El Rosario fue aprobado por 9 votos a favor (IR-V, 2 PSOE y SSP), 4 votos en contra (PP, C''s y VxR) y 2 abstenciones (los socialistas Estévez y Meneses). En este último caso, Estévez justificó su voto porque "no nos creemos estas cuentas" y porque en el mes de febrero "se pedirán modificaciones de crédito". Esta idea estuvo en consonancia con la opinión del edil de C''s, Juan Carlos Martín, quien calificó las cuentas de "continuista de las ofrecidas por el PSOE en la anterior legislatura. Hay que darle una vuelta por completo".

La representante de VxR, Ana Márquez, criticó los números por ser "muy poco participativos, por ser más políticos que sociales y por no existir el equilibrio territorial", añadiendo que "no se ha apostado por las políticas sociales". En este punto dio una ristra de ideas, no compartidas, por supuesto, por el grupo de gobierno, tal y como apuntaron la concejal de Acción Social, María de los Ángeles Rodríguez (PSOE) y su homólogo de Hacienda, Jacinto Correa (IR-V). Ambos destacaron que el desarrollo de la actividad social queda pendiente por la contratación de personal especializado y técnico, cuestiones básicas para el funcionamiento, siendo una de las áreas que sí crecen en el presupuesto.

Correa, al final, cargó contra Márquez por su afirmación de que se trata de un presupuesto poco participativo, "cuando convocamos a toda la oposición y solo C''s y PP estuvieron. Ustedes, en cambio...", dijo con cierta sorna.

Por otra parte, el edil del PP, Juan Carlos Martínez, señaló que las cuentas que se presentaban para su aprobación son deficitarias y sin equilibrio, cargando sus dudas en la gestión del agua de la concejal Soledad Negrín a la que acusó de haber recortado en el área. No obstante se defendió bien y dejó claro que "no existe recorte y sí ajuste porque las pérdidas en la red de aguas son menores de las previstas (de 1,7 millones a 1,2)".

En la conclusión del debate, el alcalde Escolástico Gil señaló que "es el presupuesto que podemos tener en referencia a la herencia que hemos recibido" y valoró positivamente la "oposición constructiva del PP y C''s" y el esfuerzo de IR-V, SSP y parte del PSOE "por construir un gobierno progresista" en base a la generosidad, destacando que el PSOE maneja el 54% del presupuesto; SSP, el 15%; y IR-V, el 35%, en lo que se entendió en un claro guiño al puño y la rosa.