La ministra de Sanidad, Dolors Montserrat, ha acusado hoy a los independentistas de querer "echar" a los ciudadanos del PP de sus casas, de sus pueblos y de Cataluña, pero, ha asegurado, que "no lo conseguirán".

En un acto de campaña en Sant Sadurní (Barcelona), su pueblo natal, la ministra ha cargado contra el "independentismo, el nacionalismo y el populismo" por haber dividido a los catalanes y sembrado el "odio" en Cataluña en los últimos años.

Monserrat ha recordado que hace unos días el consistorio de Sant Sadurní quiso nombrarla persona non grata, pero no lo consiguió, lo que ha valorado como "un éxito del PP" y de todas las personas anónimas que escribieron mensajes al alcalde diciendo que esta iniciativa era "una barbaridad".

Acompañada del candidato del PPC a la presidencia de la Generalitat, Xavier García Albiol, la ministra ha afirmado que los partidos independentistas quieren echar al PP de las instituciones catalanas, ya que son los únicos que los pueden frenar.

"El independentismo y el nacionalismo saben que les molestamos, que frenamos su deriva rupturista, y por eso buscan echarnos, silenciarnos, pero no lo van a conseguir", ha exclamado ante cerca de un centenar de simpatizantes y afiliados de la comarca del Penedès.

"Nunca nadie nos echará de nuestra casa, de nuestros pueblos y de Cataluña porque Sant Sadurní es mi casa, Cataluña es mi tierra y España es nuestro país", ha añadido entre los aplausos de los asistentes, que han recibido a la ministra con pancartas de "Muy grata" y "Sant Sadurní es tu casa".

Montserrat ha aseverado que los populares nunca permitirán que el independentismo los "acalle y atropelle" y ha lamentado el "sectarismo" de las opciones soberanistas, que "no traen nada bueno a Cataluña".

"Digo al independentismo y al nacionalismo que basta ya de hacer daño gratuito a Cataluña. Basta de odio, de mentiras, de manipulaciones y tergiversaciones. Nos quieren echar de las instituciones y por eso necesitamos un PP más fuerte que nunca", ha manifestado Montserrat, que ha hecho un llamamiento a "continuar cambiando la historia" el 21D, haciendo posible un cambio de rumbo político en Cataluña.