Europa y Canarias, Canarias y Europa, siempre han tenido una relación especial. De hecho, siempre hemos sentido una atracción por Europa como concepto y como garante de los derechos especiales que conforman nuestra situación de anclaje en este proyecto.

También es cierto que se enfrenta a una encrucijada presupuestaria derivada de la salida del Reino Unido de la UE, que tendrá connotaciones en la recaudación de fondos como integrante, así como habrá que descontar lo que Europa aportaba de su presupuesto a Reino Unido.

Esta semana se reunieron en Tenerife los ministros de Agricultura de España, Francia y Portugal, que, como todos sabemos, cuentan con regiones ultraperiféricas, y anunciaron que defenderán el mantenimiento como mínimo de la financiación actual, si bien aportan al debate algunas cautelas como: "No será fácil, el escenario es muy complicado", "vamos a dar prioridad a las RUP en esas negociaciones", "queremos defender juntos los intereses del sector agrario y de las RUP".

Canarias está comprometida con el relanzamiento del proyecto común europeo y esperamos que eso incluya la consolidación de los derechos, financiación y ayudas como RUP, al menos con la misma intensidad, aunque se consuma la salida de Reino Unido de la UE.

Un presupuesto de un billón de euros para el periodo 2014-2020 no parece verse seriamente amenazado por mantener las aportaciones a las RUP, que no han perdido su carácter prioritario actual con el "brexit", que apenas ronda los 4.000 millones de euros o, lo que es lo mismo, un 0,4 % del mismo. Cantidad que para Canarias y las RUP representan la cohesión de su territorio y la justa compensación por su integración en este ilusionante proyecto que llamamos Europa.

*Vicepresidente del Consorcio de la Zona Especial Canaria