El partido Tenerife-Barcelona B, del pasado domingo, quedará en el recuerdo por diversos factores negativos para los intereses del club blanquiazul, pero también por el estreno de un canterano con el primer equipo. Borja Llarena Barroso (Santa Cruz de Tenerife, 17-5-99) entró en el campo a falta de 10 minutos para el final, sustituyendo a Juan Carlos Real. Aunque la noche acabó en derrota, el delantero juvenil pudo completar una "semana única" y cumplir "un sueño".

Tras crecer en el Cardonal Laguna, se unió a la cadena de formación del Tenerife en el curso 11/12. Seis temporadas más tarde, aparte de competir con los equipos de División de Honor Juvenil y Tercera, probó la experiencia de entrenar con el plantel profesional. Pero la "recompensa" más valiosa le llegó al ser convocado para la visita al Zaragoza, del 13 de enero, y jugar ante el Barça B.

Llarena contó ayer, en Bota Heliodoro, que vivió "con nervios" las horas previas a su debut. "El míster me transmitió mucha tranquilidad", contó trasladándose al instante en el que pisó el césped. Luego, todo pasó muy rápido, aunque le dio tiempo de recopilar más de una anécdota. "Cuando me marché del estadio, algunos niños me pidieron fotos. Fue algo extraño pero muy bonito. Mi familia me acompañó en esos momentos".

Tras cruzar esta meta, Borja no se conforma. "Debo seguir esforzándome, porque todavía no he logrado nada". De momento, el lunes siguió con el primer equipo.