Mientras el debate continúa centrándose en la continua saturación de las Urgencias hospitalarias que la comunidad autónoma está sufriendo, el virus de la gripe no solo ha superado el umbral epidémico sino que se ha convertido en epidemia y ha superado el nivel máximo que se registró el año pasado, dejando a su paso 9 fallecidos en las Islas.

Todos estos pacientes hospitalizados, como se explica en el Informe de la Semana 03 -del 15 al 21 de enero- del Sistema de Vigilancia de la Gripe en Canarias, tenían criterios de gripe grave. "De ellos, el 55,5% fueron diagnosticados de virus tipo B, mientras que el 44,4% tenían el A", remarca el informe, que incide que "solo uno de ellos estaba vacunado".

Asimismo, el documento destaca otros 75 casos que fueron diagnosticados de gripe grave, de los cuales el 82% no estaba vacunado. En esta línea, 203 pacientes fueron hospitalizados en los centros canarios sin padecer una gripe grave. De ellos, el 72,5% tuvieron un diagnóstico del virus de tipo B y el 25,7% del virus A.

En total se han registrado 231,08 casos de gripe por cada 100.000 habitantes, lo que supone una evolución "creciente" respecto a semanas anteriores, con una circulación que ya abandona la "local" para convertirse en epidémica.

Así se constata la tendencia que se ha ido registrando a lo largo de las semanas de campaña: la evolución de la gripe en Canarias es más lenta que en el resto de España. De hecho, en el territorio peninsular la incidencia de la gripe es de 290,4 casos por 100.000 habitantes con una difusión epidémica de intensidad alta.

El mayor repunte de incidencia del virus lo han sufrido los menores entre 5 y 14 años, un grupo de edad que ha llegado a registrar más de 600 casos por cada 100.000 habitantes. Por su parte, el grupo de 15 a 64 años mostró un pequeño repunte que lo sitúa casi en los 200 casos por cada 100.000 habitantes, mientras que el que pertenece a bebés y a personas mayores de 64 vivió un descenso de incidencia tras el pico de la última semana.

En el año 2017, la incidencia máxima fue mucho menor, de 128 casos por 100.000 habitantes y se adelantó en el tiempo, pues el pico máximo se registró en la semana 48, es decir, diez semanas antes que en el periodo anterior. Además llegó con menor intensidad que el año 2016, cuando la Red Centinela Canaria (ahora Sistema de Vigilancia de la Gripe) registró una tasa máxima de 256 casos por 100.000 habitantes en la semana 5 (1 a 7 de febrero) con una onda epidémica que duró 7 semanas.

La vacuna se sigue suministrando

El Servicio Canario de la Salud (SCS) continúa disponiendo de vacunas contra el virus, con lo que la Consejería de Sanidad sigue insistiendo en la recomendación de la vacunación, "sobre todo en grupos de riesgo". En esta línea, durante la tercera semana de 2018, aunque se ha mantenido la actividad de vacunación, ha descendido paulatinamente "como se esperaba". No obstante, la campaña de este año, ya casi acabada, ha conseguido suministrar la vacuna a un 4,36% más de población que en el año anterior. Tenerife ha sido la isla donde más personas se han vacunado: 72.691 personas.