El ministro de Asuntos Exteriores ruso, Sergei Lavrov, ha denunciado el "mito irracional" de "la omnipotente amenaza rusa" que ve huellas de la injerencia rusa "por todas partes", desde el Brexit al referéndum catalán.

"En los años 90 dominó la visión de Rusia como ''aprendiz'' a la que se debe educar sistemáticamente y pese a las protestas conforme a los estándares occidentales", ha afirmado Lavrov durante la Conferencia de Seguridad de Múnich, según recoge la agencia de noticias rusa Sputnik.

Ahora, ha añadido, "es muy popular un mito irracional sobre ''la omnipotente amenaza rusa'', las huellas de la cual tratan de encontrar por todas las partes, desde el Brexit hasta el referéndum catalán".

Además, Lavrov ha restado importancia a la imputación de trece ciudadanos rusos por presunta injerencia en las elecciones presidenciales estadounidenses de 2016 y ha calificado estas noticias de "chismorreo" hasta que no se presenten pruebas.

"No tengo respuesta", ha afirmado Lavrov en respuesta a una pregunta sobre las imputaciones durante su visita a Alemania para asistir a la Conferencia de Seguridad de Múnich, un evento anual que reúne a destacados mandatarios de las principales potencias mundiales.

"Hasta que no veamos hechos --sobre la interferencia en las elecciones estadounidenses-- son solo chismorreos", ha apostillado el jefe de la Diplomacia rusa.

Por otra parte, Lavrov ha emplazado a la UE ha basarse en sus propios intereses a la hora de tomar decisiones sobre los suministros de hidrocarburos.

Además, ha instado a Bruselas a colaborar con Moscú para "renovar el sistema de relaciones internacionales". "Hay que dejar de ir a contracorriente de la historia y comenzar a trabajar juntas para renovar el sistema de las relaciones internacionales en base del papel coordinador central de la ONU", ha argumentado.

En particular ha subrayado el apoyo ruso a una cooperación entre la UE, Rusia, Estados Unidos y China para "apoyar la creación de la arquitectura de seguridad en Oriente Próximo". "Consideramos pertinente en particular su idea (del presidente de la Conferencia, Wolfgang Ischinger) de cooperación entre UE, Rusia, Estados Unidos y China para apoyar la creación de la arquitectura de seguridad en Oriente Próximo", ha apuntado.