"Valoramos las declaraciones del alcalde porque están en la línea de las demandas y solicitudes que hemos transmitido en los últimos tiempos al Cabildo y al ayuntamiento en diferentes escritos y pronunciamientos públicos". Así se manifestaron ayer colectivos y asociaciones del macizo de Anaga, después de que el regidor de la capital, José Manuel Bermúdez, planteara la necesidad de "ordenar" los accesos a esta zona de gran interés ecológico para evitar los impactos derivados del turismo.

En declaraciones a este periódico, los colectivos reconocieron que la masiva afluencia de turistas y visitantes al Parque Rural de Anaga "es una oportunidad económica para la zona", pero advirtieron de que, al mismo tiempo, supone "un reto" para la conservación del espacio natural y tradicional.

En este sentido, indicaron que en la actualidad "no está habiendo control alguno", y relataron como ejemplo que operadores turísticos y empresas de senderismo "no tienen reparos" en meter gran cantidad de personas por caminos y senderos, y de introducir grandes guaguas en carreteras de montaña, estrechas y peligrosas.

Además, se quejaron de que se están realizando convocatorias en las redes sociales para organizar excursiones "con docenas de personas" a lugares y zonas declaradas reserva integral, como es el caso de Ijuana, cuyo acceso esta restringido. "Todo esto es público y notorio y lo conoce la Administración. Se debe controlar dicha actividad y realizar las inspecciones oportunas", subrayaron.

No obstante, y a pesar de los controles que piden para la actividad turística, los vecinos y propietarios del macizo dejaron claro ayer, y así se lo han transmitido al Cabildo y al ayuntamiento, que deben tener "libre circulación" por Anaga, es decir, por sus propiedades, caminos y senderos.

Para ello, recordaron, hace unos meses solicitaron al Cabildo que se procediera a emitir un "carné de identificación" para vecinos, propietarios y personas que trabajen dentro del Parque Rural de Anaga, con el fin de "identificar" y "facilitar" el libre tránsito y el mejor control a las zonas de especial sensibilidad ambiental.

Los colectivos del macizo incidieron en que la riqueza que genera el turismo debe beneficiar a quienes habiten en él, y en esta línea indicaron que se debe "potenciar" a los actuales negocios -de restauración en su mayoría-, y "fomentar" la creación de otros nuevos.

Además, aseveraron que la vivienda vacacional y las casas rurales -junto con la propuesta de albergues en los antiguos colegios- debe ser la otra medida a potenciar. "Con ello, los vecinos y dueños de inmuebles dentro del Parque Rural podrían dedicar sus propiedades a dicho fin, potenciando el hospedaje dentro de Anaga y un turismo de calidad que respete el medio", apuntaron.

"Pero todo ello debe estar acompañado con inversiones en infraestructuras, como un plan para las playas; en telecomunicaciones, pues hemos denunciado la falta de cobertura de móvil; de servicios públicos, con la mejora del servicio de guaguas; y con la puesta en marcha de una oficina única de atención a las demandas vecinales", remarcaron. Además, añadieron, las medidas que se apliquen deben ser continuadas en el tiempo y permanentes para la conservación del medio natural, y consensuadas con los vecinos.