El primer ministro nipón, Shinzo Abe, manifestó hoy que no se debe rebajar la presión sobre Corea del Norte ni ofrecer ningún incentivo a este país, a pesar de que el régimen se ha mostrado dispuesto a dialogar sobre su desnuclearización.
Durante una intervención ante la Cámara Baja del Parlamento nipón, Abe hizo su primera valoración sobre el resultado de la visita de una delegación de alto nivel surcoreana al Norte, que se saldó con la invitación a celebrar una cumbre intercoreana en Pyongyang y con la apertura del régimen al diálogo con EEUU.
"Incluso si Corea del Norte ha aceptado el diálogo, no debemos rebajar las sanciones ni ofrecer compensaciones", dijo el primer ministro nipón, quien señaló el escepticismo de su Gobierno ante las intenciones de Pyongyang y volvió a defender la estrategia de "presión máxima" contra el régimen, en línea con su aliado EE.UU.
"Para que los contactos con Corea del Norte tengan sentido, es necesario que muestren pasos concretos hacia la desnuclearización", recalcó el líder conservador nipón.
Abe anunció que tiene previsto recibir la próxima semana en Tokio a Suh Hoon, jefe del Servicio de Inteligencia surcoreano que formó parte de la delegación que visitó Pyongyang a comienzos de semana y se reunió con el líder norcoreano, Kim Jong-un.
El objetivo del encuentro será tratar lo que se discutió con la cúpula del hermético régimen, al igual que hará la comitiva surcoreana durante un viaje emprendido hoy Washington.
Kim Jong-un transmitió a la delegación de Seúl su deseo de negociar con EEUU la desnuclearización del régimen a cambio de que se garantice la supervivencia del mismo, según los enviados, que también explicaron que tienen un "mensaje adicional" de Pyongyang para Washington que no se ha hecho público.
Aunque Washington mostró optimismo con respecto a la oferta de diálogo norcoreana, también dejó entrever cierto escepticismo debido a la actitud mostrada por Pyongyang durante anteriores negociaciones que no depararon ningún avance para frenar sus programas armamentísticos.