Trabajos diurnos, para evitar molestias a los vecinos, y durante cinco semanas. Esa es la planificación prevista para las obras de mejora que se van a realizar en la avenida de Venezuela, en el tramo comprendido entre la avenida Islas Canarias y el molino del gofio.

Los detalles de los trabajos fueron expuestos ayer a unos cuarenta residentes, en una reunión informativa que tuvo lugar en la asociación de vecinos Ruymán, de La Salud, en la que, además del alcalde, José Manuel Bermúdez, estuvieron presentes los ediles de Obras; Servicios Públicos; Deportes; y distrito Salud La Salle, José Alberto Díaz Estébanez, Dámaso Arteaga, Verónica Meseguer y Yolanda Moliné, respectivamente.

La repavimentación de la avenida se ejecutará sobre una superficie aproximada de 6.000 metros cuadrados y con una inversión de algo más de 100.000 euros. Se actuará justo en la zona en la que se hicieron los trabajos de canalización de aguas pluviales.

Además, las obras se aprovecharán también para hacer mejoras en la accesibilidad de la vía. Así, se harán las bandas de encaminamiento para ciegos en las aceras hasta los pasos de peatones, y se adaptarán estos para evitar dificultades para las personas que vayan en sillas de ruedas.

Según expusieron en la cita de ayer, la vía permanecerá en todo momento con dos carriles abiertos. Y cuando se actúe en la rotonda se buscarán alternativas viarias para evitar problemas con el tráfico que suba o baje por la vía del barranco de Santos.

Mientras, el asfaltado del tramo que va desde el molino hasta el campo de fútbol, demandado también por los vecinos, no se ejecutará hasta 2019.

La reunión de ayer sirvió también para poner al día a los ciudadanos sobre otros dos proyectos de gran calado para el barrio: la reforma del parque Las Indias, con casi un millón de euros de inversión, y la rehabilitación de la Casa Mascareño para convertirla en sede de la Casa de la Juventud.

Con respecto al primero, varios vecinos pusieron en dudas algunas de las ideas previstas en un proyecto "de bastante calado" que no solo cambiará la estética, sino la funcionalidad del recinto.

Como novedades, el parque contará tras la reforma con un quiosco, al estilo del Numancia, una pequeña plaza con escenario, una cancha, también pequeña, de baloncesto, y zonas infantiles.

En relación con el segundo, el alcalde reconoció que la capital se ha quedado "atrás" en casas para los jóvenes, por lo que con la de la Casa Mascareño y la que albergará la Casa Siliuto la capital dará "un salto" en este asunto.