La unión monetaria está dando a sus miembros la posibilidad para combinar equilibradamente las políticas económicas, tanto en su componente monetario, presupuestario y estructural, los cuales deberían actuar al mismo tiempo y de forma interconectada para consolidar la evolución económica positiva y progresiva de su economía.

Ello debería estimular la toma de medidas determinantes que estimulen la inversión y llevar a cabo reformas estructurales que fomenten una mayor productividad, así como la calidad en el empleo, más allá, incluso, de la salida del Reino Unido de la UE.

El incremento de las inversiones debe tener su reflejo en una evolución positiva y sostenible de los salarios y una reducción del paro, dirigidos a mejorar la cohesión social y a corregir los desequilibrios geográficos con el fin de garantizar la prosperidad económica de las familias y el estado del bienestar alejándonos de una Europa, que nadie desea, a dos velocidades.

También deberíamos orientar las políticas económicas, no solo europeas sino también las regionales, que deberían venir acompañadas de una contención del incremento del nivel de deuda, incrementando los salarios para fortalecer la demanda interna como factor clave para sostener el crecimiento.

Aun necesitamos muchas reformas que nos lleven por la senda de una competitividad que no se base exclusivamente en unos niveles salariales bajos, mejorando, además, las normas relativas al inicio de la actividad empresarial, los permisos de construcción, la obtención de crédito, una presión fiscal sostenible una mayor internacionalización y una mayor inversión en educación, sanidad, innovación, cualificación y eficiencia.

Para ello deberíamos trabajar en colaboración con consejos de productividad, cercanos a la economía real, que conozcan de primera mano los sectores público y privado, ya que el futuro del empleo pasa por una calidad que no debe centrarse exclusivamente en la productividad de las empresas, sino en la búsqueda de una fórmula para progresar de la mano empresas, familias y Estado.

*Vicepresidente del Consorcio de la Zona Especial Canaria