El casco de La Laguna contará este año, si todo va según lo previsto, con un velatorio. Así lo confirmaron a EL DÍA desde la Orden de los Hermanos de Belén, que está realizando reformas en su sede de la plaza de la Catedral para que albergue un espacio de este tipo. Se trata de un servicio que ya se venía prestando anteriormente de forma "puntual y sin ánimo de lucro", pero que en los últimos años había ido perdiendo fuelle en la medida en que aparecieron tanatorios modernos y equipados.

Las obras están siendo sufragadas por la propia congregación, más conocida como "los bethlemitas" y de la que es responsable fray Horacio de la Santa Cruz. De esos trabajos resultará un recinto que, además de la zona de velatorio, tendrá "el resto de dependencias que se requieren según la normativa aplicable". Es previsible que la nueva instalación sea gestionada por una empresa.

"Viendo la demanda existente por parte de los vecinos del municipio, sobre todo del centro, se consideró valorar la posibilidad de ofrecer el servicio de velatorio, según la normativa vigente", indicaron. "Por ello, en mayo de 2016 se presentó un anteproyecto ante los organismos competentes -el Ayuntamiento de La Laguna y el Cabildo de Tenerife- a efectos de obtener las licencias y permisos correspondientes, y, sobre todo, teniendo en cuenta que la edificación se encuentra dentro del perímetro de delimitación del Conjunto Histórico de La Laguna, por lo que se ha de respetar y conservar ciertos aspectos de la misma a la hora de la adecuación", apuntaron sobre el proceso seguido.

Fue en septiembre de 2016 cuando se confirmó la viabilidad del anteproyecto por parte del consistorio lagunero, mientras que a finales del pasado año obtuvieron finalmente los permisos y licencias necesarios para comenzar con las actuaciones. El listado de labores que enumeran desde la orden incluye: aprovechar y mantener la estructura principal de los espacios preexistentes, posibilitar dos entradas independientes -una para los difuntos y otra para familiares y público en general-, y separar los espacios de familiares y público de las zonas de entrada y ubicación del fallecido. A lo anterior se suma garantizar la accesibilidad a las personas de movilidad reducida, acondicionar los aseos existentes y crear nuevos para cumplir con la demanda, y adecuar el interior a las normas básicas de seguridad establecidas.

Actualmente, la actividad central de esta congregación religiosa se lleva a cabo en su Casa de Acogida, que se encuentra en la Urbanización San Diego.

las claves

El edificio albergó velatorios durante años, pero su actividad fue perdiendo fuelle en la medida en que aparecieron los nuevos tanatorios.

La Esclavitud del Cristo de La Laguna también contempla la puesta en marcha de un servicio de este tipo junto al Santuario. No en vano, el Cabildo dio vía libre al proyecto en junio del pasado año.