El magistrado del Juzgado de Instrucción número 1 de Arona, Daniel Pedro Álamo, acordó anoche prorrogar la detención de los dos ciudadanos letones arrestados por el atropello mortal de un niño de 10 años y darse a la fuga el pasado jueves. El juez continuará hoy con las diligencias, después de que ayer hubiera una "jornada maratoniana" en la que se tomó declaración a testigos (algunos persiguieron al Alfa Romeo 145 implicado tras el suceso), a los padres del menor y a los investigados.

Como era previsible, el interrogatorio más extenso correspondió a los dos acusados del accidente. Y el del copiloto acabó minutos antes de las diez de la noche.

Los cargos que se imputan provisionalmente al conductor, de 39 años, son omisión del deber de socorro y conducción temeraria con resultado de muerte. Y al acompañante, de 34, se le atribuirán un delito de encubrimiento y otro de omisión del deber de socorro.

En la jornada de hoy, el magistrado prevé tomar declaraciones a los peritos que llevaron a cabo la investigación sobre el trágico accidente. Los letones detenidos se dedican a las reformas y carecen de antecedentes criminales, según informó ayer la Policía Nacional.

Los pormenores fueron detallados por el comisario jefe de la Comisaría de la Policía Nacional en el Sur, Carlos Ludeña, y por el subinspector de Policía Judicial Víctor Secades.

Ludeña dijo que no son delincuentes habituales ni de interés policial, puesto que ambos se dedican a las reformas en el sector de la construcción y hasta ahora no constaba en el servicio policial ningún tipo de antecedente.