Los operarios del Consorcio Insular de Servicios, un organismo público formado por el Cabildo de La Palma y todos los ayuntamientos de la Isla, pierden sobre el 30% de su sueldo mensual si faltan tres días a su puesto de trabajo, aunque las ausencias sean por razones de enfermedad o vacaciones, una cláusula como mínimo abusiva recogida en los contratos y cuya eliminación será uno de los principales objetivos de los nuevos representantes de los trabajadores.

El personal que se encarga de la recogida de residuos tiene un sueldo líquido cada mes que ronda los 1.000 euros, de los que 320 se perciben a través de un plus denominado de asistencia. La paradoja es que los trabajadores pierden este complemento íntegramente desde que falten tres días al trabajo, con independencia de que se trate de una baja médica perfectamente certificada o incluso durante el período vacacional.

Tan solo se mantiene el plus si la baja supone hospitalización, es por un accidente laboral o sea como consecuencia de violencia de género. Esta situación obliga al personal a acudir en algunos casos a su puesto de trabajo incluso con procesos febriles, al no poder permitirse el lujo de sufrir una rebaja tan importante de sueldo. El descuento aplicado de forma abusiva se prorratea a lo largo del año.

Las condiciones laborales de los trabajadores del Consorcio, al menos del personal "de base", dista mucho de las ventajas de que disponen los trabajadores de cualquier otro organismo público. Ni tan siquiera cuentan con un convenio colectivo referido a los residuos sólidos urbanos, del que sí disponen los operarios que prestan el mismo servicio en otras Islas. Tampoco cuentan con pluses habituales en su colectivo, de toxicidad, penosidad o peligrosidad, ni tan siquiera con días de asuntos propios o cuadrantes anuales de vacaciones.

Hay que destacar que los trabajadores del Consorcio Insular de Servicios participaron de forma masiva, sobre el 97% del censo, en las elecciones sindicales al comité de empresa, dando un vuelco drástico a sus representantes, logrando la mayoría absoluta al CSIF que obtuvo 4 de los 5 delegados y dejando fuera a Comisiones Obreras. Los nuevos interlocutores buscarán una mejora sustancial de las condiciones laborales de todo el colectivo.