El I Seminario Interinsular de Agroecología Antonio Bello se desarrollará del 9 al 13 de abril y contará, entre otros expertos, con la participación de los investigadores Clara Nicholls y Miguel Altieri, quienes debatirán sobre los retos a los que se enfrenta la agricultura insular y el papel que desarrolla el producto local como referente de calidad y sostenibilidad.
Este primer seminario está organizado por el Instituto Canario de Investigaciones Agrarias (ICIA), la Fundación Instituto de Agricultura Ecológica y Sostenible (FIAES), y la Universidad de La Laguna (ULL). Fue presentado hoy, en rueda de prensa, por el consejero de Agricultura, Ganadería, Pesca y Aguas, Narvay Quintero, y el vicerrector de Relaciones con la Sociedad de la ULL, Francisco Javier García.
El doctor Miguel Altieri, uno de los principales teóricos de esta disciplina científica, junto a la presidenta de la Sociedad Científica Lationoamericana de Agroecología y profesora en la Universidad de California, Clara Nicholls, también estuvieron presentes en el acto para mostrar la importancia de implantar sistemas agroecológicos enfocados a conseguir la soberanía alimentaria justa, sostenible y económicamente viable.
Altieri explicó que la agroecología es una ciencia que emergió en América Latina de la conjugación de los conocimientos tradicionales de los campesinos indígenas y de la hibridación con la ciencia moderna. Destacó, además, la importancia del compromiso con “una agricultura local cuya prioridad sea producir alimentos para satisfacer las necesidades de las comunidades” y exportar a nivel global tan solo los excedentes asegurando la alimentación local y otorgar “mayor poder de negociación frente al mercado mundial”.
Por su parte, Clara Nicholls resaltó la importancia de prestar atención a los problemas que sufren los agricultores y no solo plantear soluciones, pues, según dijo, estas “no se encuentran en las universidades, sino en los campos de los agricultores”. Insistió en que el conocimiento también se crea en las comunidades rurales y para que haya un cambio hacia lo agroecológico debe existir por parte del consumidor el reclamo de “una política que responda a las necesidades alimenticias” sanas y comprometidas con el medio ambiente.
Ambos ponentes aprovecharon la ocasión para hacer un llamamiento social de concienciación al cambio de este modelo industrial por uno que conserve los recursos naturales, mantenga la cultura, tenga identidad territorial y, al mismo tiempo, sea el futuro de las próximas generaciones.