El pleno del Parlamento canario aprobó ayer, por unanimidad, una propuesta no de ley (de no obligado cumplimiento) de Podemos en defensa de las pensiones públicas y para reforzar la Seguridad Social, pero rechazó por un voto (25 frente a 24 a favor) el primer punto de su amplio articulado porque CC y PP se oponen a que el Gobierno regional pueda intervenir en esta materia y reforzar, por ejemplo, las no contributivas.

La iniciativa la impulsó, junto a un amplio equipo dentro y fuera de Podemos, el diputado Manuel Marrero, ya jubilado y que, según aclaró, no se queja de lo que percibe tras su trayectoria como profesor, pero que teme mucho por el presente y futuro del sistema, tal y como reflejan las manifestaciones por todo el país. Marrero reconoció que quisieron hacer una propuesta tan profunda que casi les agobia, por lo que agradeció el esfuerzo del resto para llegar a un consenso sobre las 31 propuestas que afectan a todo el Estado.

Socorro Beato (CC) argumentó que, más allá de tratarse de un problema complejo, las competencias son y deben seguir siendo estatales, por lo que no cree acertado que la Comunidad deba mejorar pensiones. Además, pidió a los grupos que apoyen el nuevo presupuesto estatal porque, entre otras cosas, incluye una subida de las no contributivas del 3%, del 2 para las de viudedad y del 1,5 o 1 para otras. A su juicio, es contradictorio solicitar mejoras y rechazar estas subidas, aparte de lo que implican para Canarias esas cuentas.

En una línea similar, Agustín Hernández (PP) afirmó que la propuesta incluía mucho análisis histórico y cuestiones que resulta muy difícil no apoyar, aunque tampoco comparte la parte autonómica. Por eso, y siguiendo los argumentos previos de Miguel Jorge sobre la herencia del Gobierno socialista, recalcó lo hecho hasta ahora por el PP y el déficit anual de 15.000 millones en el sistema.

Frente a estas tesis, y aunque agradeció a fondo el texto transaccionado final, Marrero considera un error garrafal y muy dañino la subida del 0,25% para las pensiones genéricas y alertó de la quiebra del sistema por las políticas actuales. En su opinión, Canarias sí puede aportar mucho más a sus pensionistas, pero, en aras del consenso, aceptó que este punto se votara por separado.

Por el PSOE, María Teresa Cruz Oval insistió en diversas ocasiones en el 44% de pobreza en las Islas y en los 43.000 canarios con pensiones no contributivas (que no llegan a 400 euros) y que, a su juicio, sí podrían disponer de un refuerzo desde las Islas, tal y como propusieron con 50 millones en una enmienda al presupuesto regional. Argumentos similares esgrimieron NC y ASG, pero ese primer punto fue rechazado.