Argentina es el principal país productor de la planta conocida como yerba mate, gracias a las propiedades de suelo y clima que tiene este país podemos encontrar una gran cantidad de este producto y ser la principal potencia mundial en su exportación.

Uno de los años más productivos de la yerba mate fue en el 2007, donde los beneficios para el mercado interno de este país llegaron a superar los 200 millones de euros, esto fue posible gracias a la temperatura que hubo durante todo el año, haciendo mucho más propicia su abundante recolección, que llego casi a los 800 millones de kilos de hoja de yerba mate.

Debido a su alta popularidad y a todos los beneficios que aporta para nuestro organismo, esta planta está presente en la mayoría de los hogares argentinos, siendo considerada una de las bebidas más populares de este país, donde sobre todo en verano nos refresca y nos da la energía necesaria para poder seguir trabajando bajo el intenso calor.

Uno de los grandes referentes en la venta de este producto es taragui, donde desde siempre han buscado ofrecer lo mejor a un precio realmente competitivo, haciendo que todo el mundo pueda disfrutar de esta bebida que cada día está más de moda, incluso en Alemania ya se comercializa en más de 30 países una bebida energizante hecha a base de yerba mate llamada "Club Mate".

Para producir un producto final con estas características es muy importante todo el proceso de cosecha, de este modo cuando lo consumimos podremos notar todas las cualidades nutricionales que nos aporta.

El primer paso es la germinación, para ello se debe cuidar que tengan todas las propiedades y características necesarias para un buen crecimiento, se suele hacer con semillas maduras y llegan a conservarse hasta que la planta alcanza los 7 centímetros de altura.

Justo después se procede a su cultivo, donde permanecen en viveros hasta un máximo de 12 meses, es justo en ese tiempo cuando son trasladados a un entorno mucho más propicio y que les permita crecer y desarrollarse.

Una vez desarrollados se procede a su cosecha, para esto es necesario un mínimo de 4 años hasta que se considera que la planta está lista para ser recogida.

Ya recogida la planta esta se somete al calor, de este modo se le quita el máximo de humedad posible. Para recoger un solo kilo de yerba mate se necesitan 3 kilos de hoja verde, debido a que cuando se secan pierden bastante peso.

Una vez la hoja esté completamente seca, se procede a su molienda para posteriormente ser introducida en bolsas y guardada en depósitos especiales antes de su transporte. Es por medio de esta molienda donde se realizan las diferentes mezclas que otorgan a la yerba mate del olor y sabor tan característico que la distingue de otras plantas.

Por último, se procede al envasado y se reparte a las diferentes tiendas o almacenes que solicitaron este producto para proceder a su venta por todo el mundo.