Construir una marca es complicado, pero cambiarla tampoco es fácil. La Universidad de La Laguna (ULL) decidió hace meses, tras un estudio del Consejo Social sobre la dispersión de las "submarcas" de la institución, que quería rediseñar su logo. El resultado, una imagen "monolítica" y que aspira a representar a toda la comunidad universitaria, será presentado hoy de manera oficial, pero ya ha generado algo de oposición en un sector del alumnado y el profesorado. Desde que hace unos días el Consejo de Gobierno aprobara la imagen, casi 1.500 personas han firmado una petición en Change.org para retirar la nueva imagen. Se quejan de que todo el proceso ha costado 13.000 euros y piden un proceso participativo. Pero, ¿debe someterse todo a escrutinio público? ¿Quién debe encargarse de rediseñar la institución?

El vicerrector de Relaciones con la Sociedad, Francisco García, explica que la razón del rediseño de la marca corporativa es que la actual "ha perdido relevancia gráfica y está desactualizada; se había quedado fuera de categoría". A esa conclusión llegó el Consejo Social, que es el órgano que representa a "la sociedad" dentro de la Universidad.

Esa certeza, añadida a la proliferación de "marcas secundarias" -se detectó más de un centenar- y a la necesidad de "adaptar la imagen a las nuevas formas de comunicación", impulsaron el cambio. "Queríamos una imagen que transmitiera una idea de universidad abierta, innovadora, internacional", sintetiza.

Para evitar que se repita la proliferación de submarcas, la web de la ULL incorporará una herramienta que creará automáticamente el logo adaptado a cada facultad o departamento.

Con respecto al procedimiento seguido para diseñar la marca, García destaca que ha sido muy participativo y competitivo. "Sacamos una convocatoria abierta para que todos los profesionales que tuvieran intención de participar presentaran el currículo". Una comisión de la que forman parte miembros de la comunidad universitaria expertos en comunicación y Bellas Artes seleccionó a tres. "A los candidatos finales les pedimos dos propuestas cada una y de ahí elegimos una".

La empresa escogida -Theam- es canaria y es la misma que ha diseñado el logo que usa AENA en toda España. "Se han intentado integrar las dos l de La Laguna y la u de universidad. Queríamos dejar claro que somos La Laguna más que nunca y universidad más que nunca".

Además, García insiste en que querían hacerlo contando con profesionales del diseño. "Nos parece que tenemos que respetar las competencias de los diseñadores, que son egresados mayoritariamente de la Universidad y son los expertos".

El nuevo símbolo fue presentado ya a los decanos de los centros y a partir de hoy se iniciará una ronda de actos en distintos espacios universitarios para transmitir los valores de la marca.

Entre los docentes que han firmado en contra de la nueva imagen están miembros de "la oposición" del rector, el grupo Renovación Convergente (RC), incluido el exrector Eduardo Doménech. También grupos de alumnos como AMEC y ACE han mostrado su contrariedad. Una de las quejas recurrentes es que "no se ve" la "u" de universidad.

García es consciente de que la falta de pertenencia a una comunidad "no se resuelve solo con una nueva marca", pero cree que es bueno que los universitarios debatan sobre la imagen de la institución, porque al final se trata de un diálogo sobre la propia identidad del centro.

Subraya, también, que hace falta tiempo para que cualquier marca se asiente y que todas viven un proceso de choque al principio, que se manifiesta de distintas formas según la institución.

El logo que ha tenido la Universidad hasta ahora fue creado "a principios de los años 90" y antes, probablemente, estuviera el del Colegio San Fernando. "Pensamos que era un buen momento para efectuar el cambio, acorde con las nuevas estrategias de comunicación".

Además de la imagen, la Universidad tiene ahora mismo "un grave problema de señalética: conviven cartelerías de centros que no existen ya, porque se han fusionado, o carteles que tienen el logo de San Fernando". La dirección del centro iniciará un procedimiento para cambiar esta "diversidad" y en breve estará listo el manual corporativo de la nueva marca.

Para terminar de cohesionar la "identidad ULL", el centro también ha recuperado la idea de abrir una tienda de "merchandising". El equipo actual ha optado por que esta sea virtual, además de vender algunas prendas en tiendas de museos.

Toda esta apuesta por la imagen forma parte de una estrategia más ambiciosa y cuyo principal objetivo es hacer más piña dentro de la Universidad.