Hasta 270 mujeres han muerto por cáncer de mama debido a que un error informático de 2009 afectó a la programación de las revisiones rutinarias de 450.000 pacientes, según ha revelado este miércoles el ministro de Sanidad británico, Jeremy Hunt.

Entre 135 y 270 mujeres "podrían haber visto sus vidas acortadas como consecuencia" de un error por la que no se enviaron las citaciones para las revisiones, ha explicado Hunt en comparecencia en la Cámara de los Comunes.

Estas cifras podrían ser considerablemente menores, ha indicado Hunt, pero los modelos estadísticos señalan que "es probable que ciertas personas de este grupo podrían estar vivas hoy si esto no hubiera pasado".

El error que ha propiciado que no se enviaran las cartas de recordatorio para las revisiones a mujeres de entre 68 y 71 años de 2009 a 2018 podrían haber resultado en la no realización de 450.000 revisiones, por lo que estas mujeres habrían perdido la oportunidad de ser diagnosticadas de forma precoz y por tanto de recibir un tratamiento eficaz, informa el diario británico ''The Guardian''.

El Gobierno ha ordenado ya una investigación independiente sobre esta cuestión, hecha pública en enero por Sanidad Pública de Inglaterra (PHE) después de casi una década de errores, ha explicado Hunt. Hurt se ha disculpado "de todo corazón y sin reservas por el sufrimiento causado".

De las mujeres afectadas, 309.000 siguen vivas y recibirán una notificación antes de que termine el mes de mayo. Las primeras 65.000 notificaciones han sido enviadas esta semana, ha apuntado Hunt. Además, el Ministerio se pondrá en contacto con las familias de las mujeres que hayan muerto por cáncer de mama y que perdieron su revisión para pedir disculpas y ofrecer un proceso para averiguar si la revisión podría haber causado una reducción de su vida. "Reconocemos que esto será increíblemente angustiante para algunas familias", ha añadido.

El portavoz laborista (oposición) de Sanidad, Jonathan Ashworth, ha reprochado que "ocho años son muchos años sin detectar un error de esta magnitud" y ha apuntado a los primeros indicios del fallo que no fueron tenidos en cuenta.