Uno de los reactores de la central nuclear de Hunterston B, en North Ayrshire (oeste de Escocia), permanecerá fuera de funcionamiento al menos hasta finales de año, después de que se encontraran nuevas grietas en su núcleo, anunció hoy la empresa EDF Energy, gestora de esta planta.

En un comunicado, la firma explicó que el reactor 3 había estado desconectado desde marzo para una inspección rutinaria, ya que se conocía la existencia de estas grietas, aunque no se esperaba que se desarrollaran de forma tan rápida.

"Las inspecciones confirmaron la presencia esperada de nuevas grietas en el núcleo del reactor y también identificaron que esto ocurría a un ritmo más elevado de lo esperado", recogió el texto.

EDF Energy señaló que prevé que el reactor se ponga en funcionamiento antes de finales de año y informó de que trabaja con los reguladores estatales para analizar el futuro a largo plazo de su planta en North Ayrshire.

Las grietas se detectaron tras unas inspecciones rutinarias en 2014, cuando el Gobierno escocés dijo que la situación podía ser preocupante y pidió garantías a los reguladores.

Donald Urquhart, inspector de la Oficina de Regulación Nuclear, calificó la decisión del cierre del reactor de "responsable y prudente" por estar basada en "garantizar la seguridad pública" y aseguró que antes de tomar cualquier acción lo mejor es esperar a "una evaluación más profunda acerca de la gravedad de las grietas".

La central Hunterston B se diseñó originalmente para estar operativa hasta 2011, pero su uso se ha extendido y podría permanecer activa otros cinco años.