El Gobierno de Canarias ha insistido hoy en que las regiones ultraperiféricas (RUP) de la Unión Europea (UE) deben recibir un trato diferenciado en su marco presupuestario, pues no pueden competir en igualdad de condiciones.

El presidente del Gobierno de Canarias, Fernando Clavijo, y el consejero de Agricultura, Ganadería, Pesca y Aguas, Narvay Quintero, recuerdan en un comunicado que la propia Comisión Europea "reconoce que las producciones de estas zonas alejadas del continente no pueden competir en igualdad de condiciones en un escenario de libre mercado internacional".

Clavijo señala que el Gobierno intenta que los recortes afecten lo menos posible a Canarias, pues "hemos venido recordando en diferentes foros que somos región ultraperiférica, no es lo mismo la agricultura y ganadería de la España peninsular, Francia, Polonia, Rumanía, que la de Canarias o cualquiera de las nueve regiones ultraperiféricas que forman parte de la Unión Europea".

El presidente canario destacó la importancia del futuro encuentro con los dirigentes de Francia, España y Portugal, Emmanuele Macron, Mariano Rajoy y Antonio Costa, respectivamente, "para arrancar el compromiso de los estados miembros de que los recortes no nos afecten".

Quintero, por su parte, recuerda que el Gobierno de Canarias "desde hace más de un año, y ante la modificación de la Política Agraria Común a partir de 2020, viene trabajando en varios frentes para hacer valer los derechos adquiridos por los productores en este sentido, y así lo ha trasladado a la propia Comisión en diferentes encuentros celebrados en 2017 y al Estado en diferentes citas, las últimas en Canarias, en enero y abril de 2018".

El responsable de Agricultura del Gobierno de Canaria asegura que las producciones canarias destinadas a los mercados europeos compiten con las exportaciones de países terceros que se benefician de acuerdos de libre cambio con la UE, así como de las reducciones de aranceles y la progresiva liberalización de los mercados, lo que supone un grave peligro que ha sido reconocido por la propia Comisión Europea.

En este sentido, el órgano europeo indicaba en noviembre de 2017 que "hay sectores agrícolas específicos que no pueden resistir la plena liberalización del comercio y la libre competencia con importaciones".

Por ello, añade "tenemos que seguir reconociendo debidamente y reflejando la sensibilidad de los productos en cuestión en las negociaciones comerciales, así como explorando modos para abordar los desequilibrios geográficos de las ventajas y las desventajas que afectan al sector agrícola dentro de la Unión como consecuencia de los acuerdos comerciales de la UE".

El propio presidente de la Comisión, Jean-Claude Juncker, se comprometió públicamente en octubre de 2017 en Guayana a que tomará en cuenta a las RUP en los estudios de impacto y en los trabajos preparatorios de todas las iniciativas legislativas que la Comisión emprenda y que les puedan afectar.

Y, sobre el POSEI, señaló en ese mismo escenario que este régimen será mantenido y que no se va a reducir ni a corregir a la baja, compromiso que también hicieron público los ministros de Agricultura de España, Francia y Portugal en la reunión mantenida en Canarias en enero de 2018.