Ayer empezó el juicio contra Francisco P. y Candelaria H. por el asesinato de un vecino de la localidad palmera de Fuencaliente al que presuntamente propinaron diferentes machetazos y puñaladas. La procesada dijo que su pareja se empeñó en ir hasta la casa donde dormía Cándido, la víctima, para buscar una motosierra que supuestamente este último le había cogido, a pesar de la hora, entre las dos y las tres de la madrugada.

Según la declaración hecha ayer por Candelaria, Francisco le pidió que "sacara pa'' fuera" la herramienta. Cándido le dijo que no la tenía y le preguntó "¿a qué vienes a estas horas? ¿A tocarme los huevos?". La acusada afirmó que el residente en Los Canarios "sacó un cuchillo" con intenciones de clavarlo. La mujer señaló que, al detectar las intenciones de Cándido, Francisco sacó un machete de la parte trasera de su "chupa" y le dio un primer golpe a la víctima, a la que se le cayó el arma blanca que portaba.

Dicho cuchillo fue recogido por Candelaria, según explicó ella misma ayer, para poder defenderse si la atacaban.

Comentó que trató de ponerse entre los dos hombres, para que Francisco no matara a Cándido. Sin embargo, por esa circunstancia, dijo que recibió un corte grave en una mano.

Aclaró que, si en vez de la mano hubiera puesto la cabeza, Francisco la hubiese dejado "con el hombre ahí". Aseguró que, al recibir el golpe de machete, el cuchillo que tenía en la mano bajó y "no se si lo pinché o no". Tiene la certeza de que cuando retiró el arma blanca, "salió sin punta", es decir, solo con el mango.

"Me siento muy culpable y yo no hice nada", dijo. Apuntó que había visto apenas dos o tres veces a Cándido y que la primera de ellas, este le tocó un pecho. Además, dijo que este la insultaba porque animó a Francisco a denunciarlo por robarle efectos.