El candidato de JxCat a la investidura, Quim Torra, ha elevado hoy el tono en la defensa de una "república catalana" para intentar seducir a la CUP, aunque no ha logrado, como ya se preveía, la mayoría absoluta necesaria en primera votación, por lo que tendrá que esperar al segundo intento del lunes.

En la primera votación de su investidura, Torra no ha alcanzado la mayoría absoluta requerida -ha obtenido 66 votos a favor de JxCat y ERC, 65 en contra de Ciudadanos, PSC, Catalunya en Comú-Podem y el PPC y cuatro abstenciones de la CUP-, por lo que tendrá que esperar a la segunda votación del lunes, en la que le bastaría, esta vez sí, la abstención de la CUP para ser investido por mayoría simple.

Había expectación por saber el listón reivindicativo que marcaría Torra en su discurso de investidura en la primera sesión, convocada para hoy, en vísperas de que el consejo político de la CUP decida mañana si sus cuatro diputados en el Parlament deben facilitar o no la investidura del candidato propuesto por Carles Puigdemont.

Y, a juzgar por los compromisos que ha enumerado a lo largo de su discurso de cerca de 50 minutos, Torra ha buscado constantemente la complicidad de la CUP, al prometer que será "leal al mandato del 1-O" para "construir un Estado independiente en forma de república".

Torra ha anunciado asimismo que impulsará una "propuesta de ''Constitución'' de la república de Cataluña", posterior a un proceso constituyente, y ha asegurado que persistirá en intentar investir a Puigdemont, a quien sigue considerando como el president "legítimo".

El cuarto candidato a la investidura de JxCat -tras los fallidos intentos de Puigdemont, Jordi Sànchez y Jordi Turull- ha dejado claro que, si es investido, él y su Govern asumirán "toda la responsabilidad" que se derive de sus actos y trabajará "sin descanso por la república".

Uno de sus ejes del Govern será precisamente la "recuperación" de las instituciones, para lo que creará un "comisionado" adscrito al Departamento de la Presidencia que elaborará un "plan de choque" para revertir los efectos "negativos" del artículo 155.

Con el expresidente de la Generalitat Artur Mas y los expresidentes del Parlament Ernest Benach y Núria de Gispert, Torra ha prometido retirar la demanda contra Mas por el 9N, a la que se ha sumado la Generalitat durante la aplicación del artículo del 155.

Torra ha ofrecido además su "mano tendida" al Ejecutivo de Mariano Rajoy, para abrir un diálogo que permita resolver el conflicto "de gobierno a gobierno", y ha reprochado a Felipe VI su papel en la crisis catalana: "Majestad, así no".

Desde Jerez de la Frontera (Cádiz), Rajoy ha subrayado que, a la espera de juzgar a Torra por sus hechos si es elegido presidente de la Generalitat, lo que ha visto y escuchado de él no le gusta.

El Gobierno, ha advertido, "estará muy vigilante" de los actos de Torra y "cualquier ilegalidad será reparada y cualquier vulneración de nuestro marco constitucional será respondida".

En su intervención en el debate de investidura del Parlament, la líder de Ciudadanos en Cataluña, Inés Arrimadas, ha opinado que Torra no viene a "dirigir" un gobierno sino un "CDR" -Comité de Defensa de la República", desde su nacionalismo "identitario excluyente": "Usted representa más leña al fuego", ha denunciado.

El actual líder de ERC en el Parlament, Sergi Sabrià, ha expresado su coincidencia con Torra y ha avisado de que "España gana o pierde, pero nunca negocia por voluntad propia".

El líder del grupo PSC-Units, Miquel Iceta, ha reprochado a Torra que acepte ser un president "rebajado y subordinado" a Puigdemont, ha lamentado que sólo se dirija a los catalanes independentistas y le ha instado además a renunciar a la vía unilateral "fracasada".

El presidente del grupo parlamentario Catalunya en Comú-Podem, Xavier Domènech, ha pedido a Torra que deje de "aferrarse" al "legitimismo" de Puigdemont y ha afirmado: "Cataluña necesita dejar de resistir y empezar a construir y ganar".

El diputado de la CUP Carles Riera se ha mostrado crítico con el discurso de Torra, por considerar que JxCat y ERC desean entrar en "un ciclo autonómico" en lugar de apostar por "la desobediencia y la unilataralidad" para "construir la república".

El presidente del PPC, Xavier García Albiol, ha advertido a Torra de que "la democracia responderá como ya ha hecho con aquellos que ya lo han intentado" si decide pasar "de las intenciones a los hechos" en su apuesta por instalarse en el "conflicto".

Por su parte, el portavoz adjunto de JxCat, Eduard Pujol, ha alabado el discurso de Torra y ha avisado de que "el compromiso con el 1-O es tozudo e irreversible, porque el 1-O lo cambió todo".

Mientras tanto, en una entrevista al diario italiano "La Stampa", Puigdemont ha asegurado que Torra convocará elecciones tras el 27 de octubre "si el Gobierno español continúa con la persecución".