Canarias volverá a contar con una encuesta que pulse la opinión de sus ciudadanos en materia social y económica, un "sociobarómetro" similar al que desarrollan otras comunidades autónomas -el Euskobarómetro del País Vasco, por ejemplo- o el mismo Centro de Investigaciones Sociológicas (CIS).

Esta iniciativa -que ya se puso en práctica en momentos anteriores en el Archipiélago, tanto por parte del Gobierno canario como del Consejo Económico y Social (CES)- es una de las 268 operaciones previstas en el Plan Estadístico de Canarias, el primero diseñado en las Islas desde la aprobación, en 1991, de la Ley de Estadística autonómica.

El plan refuerza el papel del Instituto Canario de Estadística (Istac) como el órgano que centraliza la información estadística en la Comunidad Autónoma, un papel que ya le otorgaba la modificación operada en 2014 sobre la ley regional y a la que se sumarán las revisiones a las que está siendo sometida actualmente la normativa.

La consejera de Hacienda del Gobierno de Canarias, Rosa Dávila, a cuyo departamento se encuentra adscrito el Istac, se refiere a la aprobación del plan como "un avance notable", puesto que permite contar con "una estrategia definida" de carácter plurianual -abarca desde 2018 a 2022- que prevé operaciones y plazos para cada una de las anualidades. Aunque defiende que la ausencia de un instrumento de estas características no ha impedido que se trabaje "con rigor", Dávila destaca que el plan aporta "una sistemátiva más ordenada", al tiempo que incorpora las novedades que se han producido en los últimos años en el mundo estadístico, en particular el "big data".

El plan contempla la creación de un repositorio único de datos y adopta como criterio orientado a que "la producción de información estadística se realice de forma eficiente y no redundante" el "dato único": que los datos se produzcan una sola vez, se mantengan por la unidad estadística con mayor capacidad para asegurar su actualización y se facilite su reutilización dentro del sistema de información estadística.

En cuanto al catálogo de operaciones, el documento reorganiza las que ya se realizaban e incluye algunas nuevas, entre ellas el mencionado sociobarómetro -Encuesta de Hábitos y Confianza Socioeconómica- y lo que se ha dado en llamar la "EPA canaria", una estadística que, en colaboración con la Consejería de Empleo, pondrá el microscopio sobre la realidad del mercado laboral en las Islas y dará la posibilidad de conocer la tasa de paro o de actividad prácticamente barrio a barrio.

El Plan Estadístico -así como la modificación de la ley- abren expectativas para el tratamiento de datos en Canarias, pero pueden toparse con la realidad de un Istac que no ha sido inmune a los recortes. "Somos poquitos", reconoce Dávila.