Ryanair espera que los tripulantes de cabina (TCP) de la aerolínea no lleguen a materializar su amenaza de movilizaciones en territorio europeo este verano, pero, en el caso de que finalmente convoquen una huelga, su impacto sería muy limitado, ha asegurado su director general de Márketing, Kenny Jacobs.

Los clientes de la aerolínea de bajo coste irlandesa pueden estar "absolutamente tranquilos" a la hora de hacer sus reservas de vuelos para este verano porque Ryanair está preparada para hacer frente a esta posible convocatoria de paros, ha señalado Jacobs en una entrevista con Efe.

Los sindicatos de TCP españoles (USO y Sitcpla), italianos, belgas y portugueses han dado a Ryanair un mes de plazo, hasta el próximo 30 de junio, para que responda a sus demandas de respetar los derechos laborales de cada país en el que opera y reconocer a los representantes elegidos por cada organización para negociar el convenio colectivo.

Jacobs ha restado importancia a este ultimátum y ha animado a los clientes de la aerolínea a seguir reservando sus vuelos porque, "si pasa algo, su impacto va a ser mínimo y estamos preparados para hacerle frente".

Según el directivo, la empresa lleva seis meses manteniendo conversaciones con los sindicatos, después de que, en diciembre pasado, decidiera reconocerlos, "algo que es completamente nuevo para Ryanair y estamos muy contentos con los avances hechos hasta ahora".

La aerolínea ha reconocido a los representantes de los pilotos en el Reino Unido y espera hacerlo también en España y Alemania en junio o julio, además de acordar un incremento salarial del 20 % que ya ha recibido el 90 % del colectivo y, ahora mismo, la situación es "estable".

Jacobs ha explicado que Ryanair ha empezado a reunirse también "de forma individual por países" con los sindicatos de los TCP en España, el Reino Unido, Italia y Alemania, con los que está intentando llegar a acuerdos similares a los que ya tiene con los pilotos.

De hecho, tiene sobre la mesa también una propuesta de subida salarial para los TCP en toda Europa, ha destacado el directivo, para insistir en que el reconocimiento de los sindicatos es un gran cambio para Ryanair, pero no para su modelo de productividad y eficiencia.

La aerolínea prevé reunirse en junio con las organizaciones españolas, tanto de los pilotos como de los TCP, y "nos gustaría tener todos los acuerdos hechos después del verano", ha agregado Jacobs, para quien las conversaciones van, en general, "mejor de lo que se piensa".

Por ello, está convencido de que no habrá ningún tipo de alteraciones que puedan impactar en las operaciones en verano y, aunque existe un riesgo, ha recordado que las huelgas de los pilotos de Ryanair en Alemania en diciembre y de los TCP portugueses en Semana Santa tuvieron un impacto "muy pequeño", que en el caso de estos últimos apenas afectó un 10 % de los vuelos.