Las dos Coreas comienzan a celebrar esta semana reuniones de trabajo sobre proyectos económicos bilaterales, como el transporte transfronterizo o la reforestación del Norte, tras los acuerdos de la cumbre que celebraron ambos países el pasado 27 de abril.

Los dos países, técnicamente aún en guerra, se reunirán mañana en la frontera para discutir la posible modernización y conexión de sus líneas férreas a través de la divisoria, confirmó una portavoz del Ministerio de Unificación.

En esta reunión, que se celebrará en Peace House (el mismo pabellón que acogió la histórica cumbre intercoreana del 27 de abril), las delegaciones estarán encabezadas por el viceministro de transporte surcoreano, Kim Jeong-ryeol, y el viceministro de Ferrocarril del Norte, Kim Yun-hyok.

Representantes de los dos países se volverán a reunir el jueves en la frontera para hablar de cooperación sobre carreteras.

Además, el 4 de julio las dos Coreas celebrarán una reunión sobre políticas forestales y posibles proyectos para ayudar a la reforestación del Norte, cuya geografía aún padece los efectos de la Guerra de Corea (1950-1953) y la hambruna de los noventa, que forzó a talar gran cantidad de bosques para crear suelo cultivable.

La sede este encuentro sobre silvicultura está aún por decidir, explicó la portavoz de Unificación.

El presidente surcoreano, Moon Jae-in, y el líder norcoreano, Kim Jong-un, firmaron al término de su cumbre del 27 de abril una declaración en la que se comprometían a reforzar lazos y a trabajar por la paz y la "total desnuclearización de la península".

La cita cimentó el camino para la reunión que mantuvieron el pasado 12 de junio en Singapur el propio Kim y el presidente de EEUU, Donald Trump, y el compromiso adoptado por los dos países para abrir una nueva fase de relaciones y para que el régimen abandone su programa nuclear si Washington garantiza su supervivencia.