El pleno del Cabildo de Tenerife ha aprobado hoy por quince votos contra once el expediente para hacer presidenta honorífica y perpetua de la corporación a la Virgen de Candelaria, una imagen en madera que es venerada como la patrona de la isla por la Iglesia católica.

La aprobación del expediente supone que se formará una comisión de políticos y especialistas que tramitarán esta distinción, antes de su consideración definitiva por el pleno.

A favor votaron CC y PP y en contra lo hicieron los cinco consejeros de Podemos y seis de los siete del PSOE, partido que dio libertad de voto.

El director insular de Cultura del Cabildo, José Luis Rivero, aseguró que el reglamento de distinciones honoríficas permite distinguir los símbolos comunes, y la Virgen de Candelaria está presente como tal desde hace 500 años en la cultura, la música y el arte.

"Hay motivos identitarios y religiosos" para hacer presidenta honorífica del Cabildo de Tenerife, en opinión de Rivero, para quien la religión conforma "lo que somos" tanto para los creyentes como para los no creyentes.

Aseguró que promover a la Virgen a la presidencia del Cabildo no tiene que ver con motivos políticos o electoralistas, sino con que en octubre se va a sacar a la imagen en procesión por la isla.

También argumentó que no se trata de nada anacrónico ni del pasado, y citó el caso de Cádiz o de municipios de Valencia en donde recientemente se han hecho alcaldesas honoríficas a otras representaciones de la Virgen.

Según Rivero, hacer presidenta de una institución a una representación religiosa no vulnera la aconfesionalidad del Estado que figura en la Constitución, puesto que interpretó que esa se refiere a que las decisiones políticas no deben tomarse en función de las creencias religiosas o morales de los gobernantes.