La ONG Proactiva Open Arms, cuyo buque "Open Arms" desembarcó finalmente ayer en Algeciras (Cádiz) a los 87 inmigrantes que rescató el jueves pasado frente a Libia, denunció que se están incumpliendo las normas internacionales en los rescates de inmigrantes que se desarrollan en el Mediterráneo.

Estas normas establecen que los náufragos y personas rescatadas en situaciones que hayan puesto en peligro su vida sean trasladados a un puerto seguro en el menor tiempo posible, según declaró en conferencia de prensa posterior al desembarque de ayer el jefe de operaciones de Open Armas, Ricardo Gatti.

Gatti asegura que, si en vez de inmigrantes africanos indocumentados se tratara de náufragos de veleros, cruceros o ferrys no se procedería del mismo modo y se les facilitaría el transporte correspondiente al puerto seguro más próximo.

Por este motivo la ONG ha denunciado en un juzgado de Palma de Mallorca a los guardacostas libios y al mercante Triades, de bandera gibraltareña, a los que acusa de haber abandonado a las tres personas -dos ya cadáveres y una mujer- a las que rescató también frente a Libia el 16 de julio.

En aquel caso pudieron desembarcar en Palma a la mujer y a los dos cadáveres -uno de un menor que llevaba muy poco tiempo muerto, según certificó un médico de la ONG- que, según Open Arms, fueron abandonados por los guardacostas y el mercante denunciados.

El coordinador de Operaciones de la ONG, Gerard Canals, al ser preguntado por la designación del puerto de Algeciras para su desembarque, en vez de otros más próximos, señaló que la denuncia judicial "no es la forma más adecuada de tratar con las autoridades", en alusión al caso español e italiano.

Canals aseguró que "tiene sentido seguir, y seguiremos igual", ya que el "Open Arms" partirá hoy con rumbo a Barcelona para cambiar de tripulación, someterse a una revisión y volver a tratar de rescatar aquellas personas que se juegan la vida frente a las costas de Libia.

Gatti lamentó que para estas labores de rescate "las dificultades se estén haciendo grandes" y ha puesto como ejemplo los casos de Libia y Malta, donde el Open Arms se dirigió hace unas semanas para dejar a uno de sus 17 tripulantes -una mujer que había enfermado y precisaba asistencia- y se les envió una embarcación para recogerla en alta mar, ya que la ONG tiene vedado atracar en sus puertos. Igualmente, aseguró que a los puertos italianos ni se acercan porque temen represalias, ya que este Gobierno, han asegurado, ha tratado de desprestigiarles incluso acusándolos de inventarse rescates, como el del día 16 de julio.

Los 87 inmigrantes desembarcados ayer en Algeciras son todos varones, doce de ellos menos, la mitad de los cuales son no acompañados.

Todos están bien pero, matizaron los responsables de Open Arms, "relativamente bien" porque cuando fueron rescatados el jueves pasado ya llevaban dos días en una barca, algunos casi deshidratados, y al verles venir y tomarlos por libios se tiraron al agua asegurando que preferían morir a ser devueltos a ese país.

Perfil

Los 87 inmigrantes que llegaron ayer a Algeciras proceden de Sudán y Sudán del Sur, salvo un egipcio, un sirio y otro de Gambia, todos los cuales fueron atendidos ayer por Cruz Roja para luego pasar el trámite habitual de extranjería con la Policía Española. Los responsables de la ONG aseguraron que los inmigrantes no entran en detalles al referir los maltratos y extorsiones de que han sido objeto en Libia, mientras que de los adolescentes explican que algunos eran niños cuando emprendieron este viaje que dura un mínimo de un par de años y que su máxima aspiración es llegar a un lugar -en este caso Europa- en el que su vida no corra peligro. Sólo en las costas andaluzas Salvamento Marítimo ha gestionado el rescate de algo más de 26.000 inmigrantes en lo que va de año, de los cuales 3.200 eran menores que viajaban en pateras o de polizones. Estas cifras han hecho a Andalucía y otras comunidades pedir un reparto más solidario de la inmigración, ya que hasta ahora son ellas en solitario las que están abordando un fenómeno complejo que afecta a todo el planeta.