El exinformático del banco británico HSBC Hervé Falciani ha lanzado la divisa virtual Tabu, una criptomoneda sostenible y diseñada para acabar con el fraude bancario mediante la "democratización" del mercado financiero y su apertura a todos los usuarios e inversores.

Además, Tabu nace con el objetivo de dotar al mercado financiero de una mayor "transparencia y seguridad", según ha explicado en declaraciones Falciani, conocido por su colaboración con la justicia en la revelación de datos de defraudadores fiscales.

Falciani ha contado con la colaboración de la asociación de derecho Tactical Whistleblowe para la creación de esta criptomoneda que funciona a través de la cadena de bloques o red "blockchain", una tecnología que engloba las divisas virtuales y que está construida sobre bases de datos distribuidas.

Tal y como ha explicado a Efe, el exingeniero se ha propuesto con cambiar "por completo" las finanzas tradicionales, así como los sistemas monetarios actuales.

En su opinión, el mercado financiero actual es cada vez más "cambiante" y cada vez está más "desprotegido", y ello, en un momento en el que ve necesario proteger los datos de los usuarios y potenciar la colaboración de la banca con las instituciones financieras para acabar con el fraude fiscal.

Por ello, ha destacado, su nueva moneda virtual, Tabu, aporta "información fiable" al mercado financiero y prevé promover un sistema "alternativo" al actual.

En este sentido, ha añadido, taboow.org, que es la plataforma de la que depende Tabu, proporciona a los usuarios una herramienta para "protegerse" mediante una garantía "legal" y el uso de unas "buenas prácticas" financieras.

Para Falciani, la mayor oportunidad de Tabu es su "lenguaje formal" y transparente, que difiere de la "letra pequeña" de la banca.

Por todo ello, considera que es una "verdadera" revolución con la que se eliminarán los agentes intermediarios y se habilitarán nuevos servicios financieros como, por ejemplo, los préstamos entre particulares (P2P).

Para él, si no hay una "democratización financiera" para la sociedad, "no habrá sostenibilidad económica ni democracia".

Falciani también defiende que el concepto como tal de banca "no existe", un sector centrado en la prestación de unos servicios que evolucionan al compás de las nuevas tecnologías, y que en su opinión pueden proporcionare a través de otras innovaciones.

Por último, Falciani advierte de que uno de los principales retos que tiene el mercado de las divisas virtuales es su falta de regulación, que pone "en peligro" la oportunidad de que los usuarios e inversores participen en un nuevo sistema financiero tecnológicamente "avanzado".

No obstante, espera que a corto plazo, a partir de 2020, la consolidación del "internet de las cosas", que facilita nuevas vías para obtener datos, dé más "oportunidades" a la banca de colaborar con las autoridades fiscales en la denuncia de fraudes fiscales.

Para ello es clave la participación de las administraciones públicas y los gobiernos, y "muchos" de ellos tienen la voluntad, pero les faltan las "condiciones y el tiempo", ha concluido.