Los usuarios vulnerables de la vía (peatones, ciclistas y motoristas) han sufrido en Canarias algo más de 9.000 accidentes de tráfico en la última década. De ellos, el 62% corresponde a motoristas, el 27% a peatones y el 11% a ciclistas. Desde 2012 la mortalidad de estos colectivos se ha incrementado en un 6% y suponen ya el 47% de los fallecidos en accidentes de circulación en España, media que Canarias alcanza el 62%.

Éstas son algunas de las conclusiones del estudio ''La muerte silenciosa. Los accidentes de tráfico en los usuarios vulnerables: peatones, ciclistas y motoristas (2007-2016)'', presentado hoy por la Fundación Línea Directa y realizado en colaboración con Centro Zaragoza.

Sólo en la última década, 5.000 motoristas, 4.200 peatones y 700 ciclistas han fallecido en las carreteras españolas y casi 500.000 resultaron heridos. El repunte general de la siniestralidad que se vive en España en los últimos años parece haber afectado especialmente a estos usuarios. De hecho, desde 2012 la mortalidad de estos colectivos (peatones, ciclistas y motoristas) se ha incrementado en un 6% y suponen ya el 47% de los fallecidos en accidentes de circulación en España, media que Canarias alcanza el 62%.

Si se analiza la evolución de la mortalidad en las carreteras españolas durante la última década, los usuarios vulnerables tienen un ritmo de descenso en el número de fallecidos de 13 puntos porcentuales menos que los vehículos de cuatro ruedas. De hecho, en 2007 hubo 716 muertos menos en el colectivo vulnerable que en los vehículos de cuatro ruedas, mientras que en 2016 la diferencia entre ambos tipos de usuarios se redujo a 104 fallecidos.

Según los conductores españoles, los usuarios vulnerables no cumplen las normas, especialmente los ciclistas y motoristas, que son los colectivos peor valorados. Una percepción que no se corresponde con la realidad, ya que, según los datos de Línea Directa Aseguradora, cedidos a su Fundación para este estudio, solo el 13% de los peatones son responsables de los accidentes de los dos últimos años. Un porcentaje que asciende al 25% en el caso de los ciclistas y al 41% en el de los motoristas, todos muy por debajo del porcentaje de culpa del resto de vehículos.

LA LESIVIDAD DE LOS USUARIOS SE DISPARA.

Al definir el concepto de ''usuarios vulnerables'', la Organización Mundial de la Salud (OMS) afirma que son todos aquellos usuarios de la vía que, en caso de accidente, carecen de un escudo protector, por lo que los impactos son absorbidos directamente por el cuerpo de la víctima. Además, variables como la menor masa, la mayor tendencia natural a la caída y la casi ausencia de dispositivos de seguridad pasiva (ADAS), convierten a peatones, ciclistas y motoristas en colectivos especialmente frágiles en caso de accidente.

A esa vulnerabilidad natural, se le une el importante repunte en la lesividad vivido en la última década, que alcanza un 12,4% y que, en los últimos cuatro años, ha alcanzado cotas alarmantes. De hecho, los usuarios vulnerables lesionados en accidente de tráfico se han incrementado desde 2012 en un 49% en el caso de los ciclistas, un 33% en el de los motoristas y un 17% en los peatones.

Los motoristas heridos sufren la mayor parte de sus lesiones en todo el cuerpo y en las extremidades inferiores, que suelen producirles fracturas bilaterales del fémur, tibia y pelvis y lesiones en la tibia proximal o fémur distal. Por su parte, los peatones sufren más golpes en la cabeza y en las piernas, que suelen traducirse en los traumatismos craneoencefálicos y en fracturas muy graves. Por último, los ciclistas reciben sufren más heridas en las extremidades inferiores y en la cabeza, lo que explica la lesión mortal más frecuente, que son los traumatismos craneoencefálicos graves.

LADILLA.

La Fundación Línea Directa también ha querido identificar qué comunidades tienen una mayor proporción de accidentes de usuarios vulnerables. Para ello, ha creado una tasa de accidentalidad dividiendo el número de accidentes de peatones, motoristas y ciclistas en España por cada 100.000 habitantes. Luego se ha dibujado un mapa de cada territorio en función de la media nacional, que alcanza los 773 accidentes por cada 100.000 habitantes.

Por comunidades autónomas, Cataluña, Baleares y Madrid tienen los índices más altos debido, entre otros factores, a la mayor penetración del parque motorista urbano y la mayor afluencia de peatones. En el lado opuesto se sitúan Navarra y Castilla-La Mancha, con los índices más bajos. Canarias, por su parte, se encuentra notablemente por debajo de la media, con 432 accidentes por 100.000 habitantes.

Según Francisco Valencia, director general de la Fundación Línea Directa, "en la última década se ha vivido un gran descenso de la mortalidad en carretera en nuestro país; sin embargo, esta realidad tiene dos sombras importantes: el repunte en el número de muertos que estamos viviendo en los últimos años y las cifras de accidentalidad de los usuarios vulnerables, que ya suponen casi el 50% de los fallecidos en accidente de tráfico. Por eso, es el momento de llamar la atención a la sociedad sobre la fragilidad de estos colectivos, en un momento, además, en el que están cobrando un especial protagonismo por el surgimiento de nuevas formas de movilidad personal".