Guardas rurales de Tenerife denunciaron recientemente a cuatro cazadores en la zona de Anaga por cometer diversas irregularidades.

Los infractores estaban cazando con escopetas y perros perdiceros dentro de la Reserva Natural de Ijuana en un día no hábil para ejercer la actividad.

Además, todos ellos carecían de la preceptiva autorización del Cabildo para desarrollar la práctica cinegética.

En el momento en que fueron localizados, los cazadores tenían sus escopetas montadas, cargadas y dispuestas para la captura de perdices.

Los guardas rurales conminaron a los citados individuos para que entregaran sus escopetas en el departamento de Intervención de Armas de la Guardia Civil, en la Comandancia de Ofra.

En el mismo día, los citados vigilantes también denunciaron en Chamorga a otro cazador por utilizar escopeta, perros perdiceros y de pelo, en una zona en la que únicamente están autorizados perros de pluma.