El aumento de los ingresos por impuestos y cotizaciones, así como el menor crecimiento del gasto, han hecho posible que el déficit de las Administraciones Públicas hasta septiembre se reduzca a 18.585 millones de euros, equivalentes al 1,53 % del PIB, lo que supone 0,51 puntos menos que un año antes.

Sin contar con las Corporaciones Locales, el déficit público de los tres primeros trimestres del año es consecuencia de un incremento de la recaudación del 6,3 % que supera en más de dos puntos la subida del 4,2 % de los gastos, según los datos publicados hoy por el Ministerio de Hacienda.

La meta para el conjunto del año es del 2,7 % del producto interior bruto (PIB), de acuerdo con la flexibilización del objetivo para este año, pactada por el Ejecutivo socialista con Bruselas.

En el caso del Estado, los datos llegan hasta octubre y muestran una reducción del déficit en los diez primeros meses del año hasta 8.384 millones de euros, equivalentes al 0,69 % del PIB, frente al 1,14 % del mismo período del año anterior.

Las Comunidades Autónomas aumentaron su superávit entre enero y septiembre hasta los 2.035 millones (0,17 % del PIB), frente a los 481 millones del mismo período del pasado año (0,04 %), una evolución positiva achacable al crecimiento en un 3,7 % (2.897 millones) de los recursos netos del sistema de financiación autonómica.

La mayoría de autonomías registró superávit, salvo Castilla-La Mancha, Castilla y León, Murcia, Navarra y la Comunidad Valenciana.

La reducción del 36,8 % del déficit del Estado hasta octubre fue posible gracias al incremento del 9 % de los ingresos no financieros, hasta 167.937 millones, frente a un aumento el 5,4 % de los gastos no financieros, hasta 176.321 millones.

Los ingresos por impuestos ascendieron a 145.961 millones, el 8,5 % más, debido sobre todo al aumento del 13,5 % de los impuestos sobre renta y patrimonio -que incluyen renta y sociedades-, hasta 63.078 millones.

La subida de los ingresos por el Impuesto sobre la Renta de las Personas Físicas (IRPF) se debe al aumento de las retenciones del trabajo, a pesar de la rebaja que entró en vigor en julio con los Presupuestos de 2018, ya que las subidas de los salarios públicos y las pensiones han compensado parcialmente esa rebaja y la moderación en la creación de empleo.

En el caso del Impuesto de Sociedades ha influido la presentación del segundo pago fraccionado, que supone un 23,1 % más que el del año anterior, según datos de la Agencia Tributaria, aunque casi todo el incremento se concentra en cinco grandes grupos consolidados, sin los que el resto de empresas ingresaron alrededor de un 4 % más.

La recaudación por el impuesto sobre el valor añadido (IVA) aumentó un 6,5 %, hasta 61.739 millones.

Además, las rentas de propiedad crecieron un 30,7 % más, por los mayores dividendos del Banco de España, de Loterías y Apuestas del Estado y de ENAIRE.

En el capítulo de gastos subieron todas las partidas y destaca el aumento del 10,4 % de las transferencias a los Fondos de la Seguridad Social para apoyar el equilibrio presupuestario del sistema.

Las transferencias de capital crecieron un 8,8 %, sobre todo por el incremento de 216 millones a las Comunidades Autónomas debido al ritmo de ejecución de determinadas partidas (desarrollo del medio rural y plan estatal de vivienda).

Hasta septiembre, los Fondos de la Seguridad Social redujeron su déficit un 11,2 %, hasta 5.848 millones, tras aumentar lo ingresos por cotizaciones un 5,3 %.

Dentro de este subsector, el sistema de la Seguridad Social registró un déficit de 7.726 millones (0,64 % del PIB), el 2,7 % menos interanual, que puso ser compensado en parte por los superávit del Servicio Público de Empleo Estatal (1.722 millones) y del Fondo de Garantía Salarial (156 millones).