El Banco de Inglaterra gastó 95.674 libras (unos 107.000 euros) más impuestos en una fiesta para sus empleados el pasado verano, mientras el Gobierno estaba inmerso en la negociación del "brexit" o salida de la Unión Europea (UE), informa hoy la agencia británica PA.

La contabilidad del banco, a la que accedió PA al amparo de la ley de Libertad de Información, revela que el evento para unos 2.500 empleados y sus familias contó con un castillo inflable, un concurso de pastelería, una búsqueda del tesoro y actividades deportivas.

El mes pasado se reveló también que el gobernador de la institución, el canadiense Mark Carney, se embolsó 50.000 libras (56.000 euros) en concepto de gastos y dietas entre marzo y mayo pasados.

En respuesta a las cifras de hoy, el banco central, que el miércoles publicó un impactante informe sobre los posibles efectos económicos del "brexit", dijo que la fiesta estuvo "cuidadosamente presupuestada".

La entidad subrayó que el festejo del Día del Gobernador "es una larga tradición" e "importante para todos los empleados del banco".

El miércoles, el banco emisor inglés predijo que un "brexit" duro o sin acuerdo el próximo 29 de marzo sumiría la economía en el caos, con una depreciación de la libra esterlina de hasta un 25 % y un aumento de la inflación al 6,5 %.

Una salida drástica causaría además una reducción del producto interior bruto (PIB) del 8 % sobre el nivel actual de aquí a 2023 y el desempleo subiría al 7,5 %, según la entidad, que recomienda que, cualquiera que sea el "brexit", se implemente un periodo de transición.