El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, consideró ayer que el mejor homenaje que se puede rendir a la Constitución con motivo de su 40 aniversario que se celebra hoy es abrir el debate sobre su reforma. Sánchez lanzó este mensaje en su intervención en el acto que presidió en el Palacio de la Moncloa con más de medio centenar de jóvenes de toda España que este año han cumplido su mayoría de edad y en el marco de los actos conmemorativos de las cuatro décadas de la Carta Magna.
El jefe del Ejecutivo recalcó que, “además de una necesidad”, la reforma de la Constitución es “el mejor homenaje” a este texto y una oportunidad para abrir un gran debate sobre el futuro de España en el que los jóvenes tengan una especial participación.
Para él, una reforma constitucional para adaptarla al siglo XXI podría garantizar más décadas de progreso y afrontar con más eficacia los problemas que tienen los jóvenes. Los partidos cree que deben estar a la altura de ese anhelo y saber canalizarlo y, en consecuencia, pedió ser igual de “ambiciosos y generosos” que en 1978. Tras recordar los efectos que en España ha causado la reciente crisis económica, reconoció que es “legítimo” que muchos jóvenes tengan un sentimiento de enfado, lejanía o protesta con las instituciones públicas.
Por eso subrayó que la principal labor que se ha de hacer en España es recuperar la confianza de los ciudadanos en sus instituciones y en la democracia.
De ahí que haya defendido que las conmemoraciones de la Constitución cuenten con los jóvenes porque señaló que la democracia exige ciudadanos comprometidos con ella y que no crean que viene dada.
El presidente del Gobierno rememoró que hace 40 años la sociedad española aspiraba a progresar económicamente sin dejar a nadie atrás, entrar en Europa, cohesionar territorial y socialmente el país y modernizarlo. Todo eso “y mucho más” cree que se ha conseguido pese a “imperfecciones y errores”. “Fuimos muy ambiciosos y conseguimos como país lo que nos propusimos”, añadió antes de recordar los problemas que se sortearon.