El Real Madrid ha protagonizado este miércoles la peor derrota de su historia, como local, en las competiciones europeas después de haber caído 0-3 ante el CSKA de Moscú en la sexta y última jornada de la fase de grupos en la Liga de Campeones.

El equipo de Santiago Solari, que ya estaba clasificado para octavos de final como primero de grupo, certificó su peor resultado en Europa en un partido donde mereció mejor suerte, sobre todo en la primera mitad. Sin embargo, su falta de eficacia dio vida a los rusos, que tomaron el estadio Santiago Bernabéu.

Hasta la fecha, la peor derrota de los blancos en Europa, como local, databa del 20 de marzo de 1991, cuando el equipo dirigido por Alfredo Di Stéfano cayó ante otro equipo ruso, el Spartak de Moscú, por 1-3. Aquella noche comenzó marcando Butragueño, pero los visitantes se llevaron el botín de Chamartín.

Por la misma diferencia de goles, una década más tarde, también ganó el Bayern Múnich (2-4) en la segunda fase de grupos. Los alemanes, dirigidos por Ottmar Hitzfeld, tomaron el templo merengue con goles de Scholl, Effenberg, Fink y Paulo Sergio. Fue la primera vez que el Real Madrid encajaba cuatro tantos en su feudo en la máxima competición continental.

Aquel día marcó Nicolas Anelka y también lo hizo Míchel Salgado, ayudado por Jeremies en un lanzamiento a la portería defendida por Oliver Kahn. Aquella temporada los jugadores dirigidos por Vicente del Bosque se proclamaron campeones de Europa, eliminando --precisamente al Bayern-- en las semifinales disputadas en el Olímpico de Múnich.

Este miércoles, el equipo blanco añadió una página negra a su brillante trayectoria europea con la mayor derrota de su historia como local. Los goles de Chalov, Schennikov y Sigurdsson tumbaron la fiabilidad de los madridistas, aunque no sirvió a su oponente -ni siquiera- para clasificarse a la ''Europa League''.