Agentes de la Policía Nacional han detenido en Madrid a un ciudadano de origen portugués que tenía en vigor una orden europea de detención y entrega por las autoridades portuguesas por presuntamente violar a una mujer tras conocerla en una sala de fiestas el 27 de diciembre de 2003, ha informado la Jefatura Superior de la Policía de Madrid en una nota de prensa.

Ambos acordaron mantener relaciones sexuales consentidas en el hotel donde se alojaba el arrestado hasta que, de forma violenta, agredió brutalmente a la víctima y consumó la agresión sexual. Además, al detenido le constan antecedentes policiales en España por malos tratos físicos. Hace pocos días, y tras diversas gestiones, fue localizado y detenido en Madrid.

Además, en otra operación, ha sido detenido un ciudadano británico que tenía en vigor una orden europea de detención y entrega por tráfico de drogas y crimen organizado. La detención se llevó a cabo en el aeropuerto de Tenerife Sur.

Las autoridades judiciales de Edimburgo (Reino Unido) buscaban a este hombre, de 35 años, por su presunta participación en las actividades ilícitas realizadas por una importante organización criminal internacional que, entre 2011 y 2018, operó en Reino Unido, Islandia, Países Bajos, Emiratos Árabes Unidos, Portugal, España, China y México, entre otros.

El fugitivo se encontraba en el sur de la isla de Tenerife, desde donde llevaba a cabo las actividades de dirección y control del grupo criminal. Debido a las numerosas medidas de seguridad que tomaba, y a la gran cantidad de medios que tenía a su disposición, las labores de investigación no pudieron desvelar su localización hasta fechas cercanas a su detención.

Mediante un dispositivo establecido en diferentes zonas de la isla, fue interceptado en las proximidades del aeropuerto. En ese momento fue detenido y puesto a disposición judicial, decretando su ingreso en prisión a la espera de hacer efectiva su entrega a la autoridades inglesas.

Se le imputa un total de 29 delitos por participación en organización criminal; tráfico ilícito de drogas, narcóticos y sustancias psicotrópicas; tráfico ilícito de armas, municiones y explosivos; blanqueo de capitales; delitos informáticos; homicidio y agresión con lesiones graves; secuestro, detención ilegal y toma de rehenes y robo organizado con armas.

Su grupo criminal introducía grandes cantidades de cocaína y hachís en Reino Unido y en otros países de la Unión Europea y destacaba por la gran violencia con la que actuaban, utilizando armas de fuego. Los delitos que se le imputan están penados con unos 100 años de prisión.

Durante el pasado mes de diciembre, los agentes especializados en la localización de fugitivos han detenido a otros diez buscados por autoridades judiciales extranjeras. Los arrestos han sido llevados a cabo en El Ejido (Almería), Jaén, Madrid capital, Móstoles, Lérida, Las Palmas de Gran Canaria y Gandía (Valencia) por diferentes delitos como tráfico de drogas, robos con violencia, agresiones sexuales, abusos a menores, blanqueo de capitales o delitos financieros.