La asociación de vecinos El Molino, de Barranco Grande, considera que la red de saneamiento que discurre por el distrito Suroeste debería tener, al menos, el doble de capacidad (diámetro) que tiene en la actualidad.

Así se lo han hecho saber al concejal de Servicios Públicos de la capital, Dámaso Arteaga, en un escrito dirigido después del vertido de aguas residuales que se produjo en el barranco el pasado fin de semana, que la empresa responsable del servicio en Santa Cruz, Emmasa, achacó a una avería motivada por una acumulación de toallitas y trapos tirados a través de inodoros de la zona.

El colectivo vecinal de Barranco Grande sostiene que la red de aguas negras del distrito es "antigua" y "unitaria", por lo que entra en carga desde que se producen unas "mínimas lluvias".

También remarca que la tubería que discurre por la carretera general de Sur (TF-28), desde el cruce de Santa María del Mar, dirección Barranco Grande, posee una válvula de emergencia en la rotonda del centro de salud de Barranco Grande que cada vez que salta "descarga las aguas fecales en el barranco de La Monja, que, a su vez, desemboca en el barranco de Barranco Grande".

"Esta circunstancia se ha repetido en innumerables ocasiones, principalmente cuando la tubería entra en carga, pero también por otras circunstancias", explican desde la asociación de vecinos.

La última fue la que se produjo el pasado fin de semana. Tras tener conocimiento del vertido, que según la asociación había comenzado cuatro días antes, se dio aviso a los responsables del tagoror del distrito Suroeste, que hicieron las gestiones necesarias para que Emmasa cerrara la válvula e intentara limpiar la zona afectada.

Precisamente, la compañía recordó la importancia de no arrojar elementos de difícil disolución a través de los baños, con el objetivo de mantener un funcionamiento "óptimo" de la red de saneamiento y evitar averías.

Vertido de agua ultrafiltrada que sobró del Sur

Emmasa aseguró ayer que el agua vertida durante la mañana a través del aliviadero de La Hondura, que generó bastante espuma en el mar y preocupación de los ciudadanos, era agua "ultrafiltrada" de la que se destina al riego en el sur de la Isla. Cuando no se utiliza, aclaró la compañía, se alivia de esta forma./ M.E.