El Servicio Canario de la Salud (SCS) tiene previsto que el Hospital Universitario Doctor Negrín de Gran Canaria comience este año a hacer trasplantes de corazón, tras un 2018 de récord en donaciones, que ha permitido a sus centros realizar 208 trasplantes de riñón, hígado y páncreas.

El consejero de Sanidad, José Manuel Baltar, y el director del SCS, Conrado Domínguez, han explicado este lunes que el Negrín está completando ya los preparativos necesarios para hacer trasplantes cardiacos a partir del segundo semestre, lo que representará todo un avance para los diez o quince canarios que cada año tienen que desplazarse a la península a esperar la oportunidad de un órgano.

La sanidad pública canaria amplía así su oferta de trasplantes después de un ejercicio en el que ha batido todas sus cifras históricas en este tipo de intervenciones, con 155 trasplantes de riñón (más otros cinco con donantes vivos), 42 de hígado y seis de páncreas, gracias a la generosidad de 110 donantes y sus familias.

El director del SCS ha subrayado que la sanidad canaria es plenamente consciente del esfuerzo económico y familiar que representa para un paciente que necesita un trasplante de corazón mudarse a vivir a la península hasta que se de la circunstancia de que hay un órgano compatible disponible para él.

Además, ha defendido que contar con una unidad especializada en trasplantes cardiacos en Las Palmas de Gran Canaria permitirá al SCS aprovechar mejor los órganos que donan los pacientes en las islas.

Según cifras ofrecidas por el coordinador regional de trasplantes en Canarias, cada año reciben un corazón de otra persona entre 10 y 15 pacientes canarios, pero siempre en hospitales de la península.

Los responsables del SCS ha explicado que este año se da el paso de incorporar el trasplante de corazón a la oferta de la sanidad canaria porque se considera que ya dispone de un hospital con equipos profesionales y materiales preparados para afrontar este tipo de operaciones quirúrgicas, el Doctor Negrín de Gran Canaria.

Y, mientras tanto, la sanidad canaria se sigue preparando para poder realizar también en el futuro trasplantes de pulmón.

Durante 2018, 110 personas donaron sus órganos a la sanidad pública en Canarias, 17 más que en 2017, con lo que el programa de trasplantes en las islas superó por primera vez el listón del centenar de donaciones (el récord anterior estaba en 98).

Esos órganos sirvieron para realizar 102 trasplantes en el Hospital Universitario de Canarias (91 de riñón, cinco de riñón de donante vivo y seis de páncreas), 42 en el Hospital Universitario Nuestra Señora de La Candelaria (todos de hígado) y 64 en el Complejo Universitario Materno-Infantil (todos de riñón).

Si se tienen en cuenta no solo a los trasplantes realizados en Canarias, sino también a los llevados a cabo con esos órganos en otros hospitales españoles, la generosidad de esos 110 donantes y sus familias sirvió para salvar la vida a 259 personas, ha enfatizado el consejero de Sanidad al presentar este balance.

Con estas cifras, la tasa de donación de órganos aumenta en Canarias hasta los 49,5 casos por millón de habitantes, pero en las islas todavía hay un 15 por ciento de familias que se niega a que los órganos de su pariente muerto sean cedidos a otra persona.

Baltar ha señalado al respecto que toda la sanidad pública va a seguir trabajando en concienciar a la población en la importancia de ser donante, porque, ha recordado, recibir un órgano de otra persona sigue siendo "la última, la única o, como mínimo, la mejor oportunidad" de supervivencia para un gran número de pacientes.

En este sentido, ha animado a quien quiera ser donante de órganos a que se lo comunique a sus familiares, para que estos respeten su voluntad llegado el momento.

También ha recordado que la sanidad pública cuenta con un registro de voluntades anticipadas en el que cualquier paciente puede dejar constancia de su decisión de ser donante, con plena validez jurídica.