El Papa se reserva la posibilidad de "verificar la voluntad de ambas partes" para mediar en la crisis de Venezuela, según ha admitido el director en funciones de la oficina de prensa del Vaticano, Alessandro Gisotti.

"El Santo Padre siempre se ha reservado y por tanto se reserva la posibilidad de verificar la voluntad de ambas partes determinando si existen las condiciones para seguir este camino", ha comentado preguntado sobre la posibilidad real de que el pontífice ejerza de mediador en la crisis del país latinoamericano.

En viaje de regreso de Abu Dabi, Francisco reconoció que había recibido una carta del presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, pero señaló que aún no la había leído. No obstante, apuntó a que si el mandatario venezolano le pidiera mediar en la crisis de ese país, no lo haría a menos de que las dos partes así lo quieran.

Por su parte, la Iglesia de Venezuela señaló que la mediación del Papa "es inviable" porque este tiempo de intervención es un mero recurso del Gobierno de Nicolás Maduro al que apela "cuando se ve apretado, con el agua al cuello". En declaraciones a la prensa del país, el cardenal Baltazar Porras, añadió que la Santa Sede "ya intervino hace dos años y la actitud del régimen de no avanzar en acuerdos fue una burla".