Un incendio en el distrito norteño de Viseu -a 320 kilómetros de Lisboa- seguía ayer activo después de cuatro días y movilizaba a más de 500 profesiones, informó la Autoridad Nacional de Protección Civil (ANPC) lusa.

Las imágenes difundidas por las agencias de comunicación muestran con claridad la violencia de las llamas y la lucha de los habitantes de las zonas afectadas para evitar su extensión y los daños a sus pertenencias y a sus medios de vida.

El fuego de Sao Pedro do Sul se ha convertido en el mayor de los últimos días en el país y allí se han destacado 119 vehículos y dos medios aéreos para tratar de combatir el fuego, que se ha cobrado ya daños personales y materiales.

En la jornada del sábado, un bombero resultó muerto y otro herido grave en un accidente de tráfico mientras participaban en los trabajos de extinción del incendio.

Otro gran fuego en el distrito de Viseu, localizado en Tabuaco y que estaba activo también desde el viernes, ya estaba controlado después de que se empleasen hasta 146 bomberos, 40 vehículos y dos helicópteros.

La ANPC identificaba ayer por la mañana siete incendios activos en el país, todos ellos en el norte, donde ha deflagrado uno en el distrito de Braga (Terras de Bouro) que movilizaba 38 efectivos y ochos medios terrestres y seis aéreos.

El Instituto de Meteorología (IM) luso ha situado en alerta de riesgo máximo de incendio a la mayoría de las poblaciones del norte de Portugal y a varias de la zona del centro y del sur del país.